Un adolescente de 14 años confesó haber asesinado a cinco miembros de su familia a disparos con una pistola, y fue el propio chico que llamó a la Policía en la madrugada de este martes en Estados Unidos. En un primer momento declaró que había escuchado los disparos cuando se encontraba en un piso superior de la casa.
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El sheriff de Alabama dijo que las víctimas mortales eran el padre, la madrastra y los hermanos del joven atacante.
El chico, que utilizó una pistola de 9mm, estaba "ayudando a los investigadores a localizar el arma que dijo haber tirado cerca" de los hechos, en la localidad de Elkmont, en Alabama, según informó la Oficina del Sheriff del Condado de Limestone en un tuit.
Tres de sus familiares murieron en el acto, en su casa de Elkmont, mientras que otros dos fueron trasladados de urgencia a sendos hospitales donde no pudieron hacer nada por sus vidas.
Los agentes de policía encontraron a un adulto y dos menores muertos y a un adulto y un niño con heridas graves. El adulto fue llevado en avión al hospital de Huntsville mientras que el niño fue llevado en avión al Hospital Infantil de Birmingham, según medios locales.
Justo antes de las 3 de la madrugada, el Sheriff Mike Blakely dijo que las dos víctimas sobrevivientes habían muerto, y que el niño de 14 años que llamó a las autoridades confesó el crimen.
Este incidente, sumado a los recientes tiroteos que van en aumento en el país, como el del pasado fin de semana en el que un hombre mató a siete personas e hirió a otras 22 en Texas, generan incertidumbre y provocan nuevos pedidos para implementar medidas que ayuden a prevenir y detener los tiroteos en el país.
