Fuentes empresariales de Fray Bentos (Uruguay) indicaron hoy que la mayoría de los comercios
situados en el paso fronterizo hacia Argentina han reanudado "muy lentamente" sus labores desde que
la Asamblea Ambiental de la vecina ciudad argentina de Gualeguaychú l
evantara
por 60 días el piquete en el puente.
"Casi todos vamos abriendo a media máquina, porque no tenemos ninguna certeza de cómo van a
seguir las cosas en dos meses", indicó a medios locales el portavoz de los empresarios afectados
por el corte, Leopoldo Cayrus.
La Asamblea Ambiental de Gualeguaychú resolvió levantar el bloqueo para negociar una solución
al problema de la papelera de la firma finlandesa UPM (ex Botnia), que según ellos es contaminante.
La solución definitiva del conflicto podría pasar porque las autoridades uruguayas
permitieran un examen interno de la planta, a cambio de que se realicen controles similares en
todas las compañías instaladas en la ribera del Río Uruguay, que hace de frontera natural entre los
dos países.
Desde que comenzó el conflicto en 2006, varias empresas y comercios se vieron obligados a
paralizar su actividad a ambos lados de la frontera.
Las pérdidas ocasionadas por el corte superan los 600 millones de dólares, aunque "aún no se
ha hecho un cómputo exacto de lo que han supuesto estos cuatro años para el transporte, el comercio
y especialmente el turismo", apuntó Cayrus.
Desde que el paso se abrió el sábado y
hasta
el domingo por la noche cruzaron la frontera hacia Uruguay unos 900 automóviles con cerca de
4.000 personas, cifras que, según el portavoz de los empresarios fraybentinos, "demuestran el gran
interés de los argentinos por venir a Uruguay".