Hubo seis el sábado nada más. Sergio Saracco, ex ministro de Salud, afirmó al respecto: “Los chicos no saben leer. No importa que le pongamos un rótulo que diga aguarrás. El chico ve una botella de agua con un líquido transparente y lo toma&

Se enciende la alarma tras los reiterados casos de chicos intoxicados con artículos de limpieza en Mendoza

Por UNO

En menos de 24 horas, seis chicos mendocinos se intoxicaron al ingerir productos de limpieza y otros líquidos que estaban almacenados en botellas de gaseosa o jugo. El Departamento de Toxicología recibe entre tres y cuatro consultas diarias por el tema, pero los casos pueden ser más, ya que algunos centros médicos tienen su propio protocolo para operar en estos casos y no necesitan asesoramiento para proceder.

Dos hermanos de Maipú, de 2 y 11 años, ingirieron un plaguicida (veneno para cucarachas); un chiquito de un año y seis meses de San Martín tomó líquido desengrasante, un nene de un año y ocho meses de Lavalle bebió un plaguicida fosforado, un pequeño de dos años llegó al Fleming luego de haber ingerido citronella (repelente de insectos), y otro bebé de un año, en San Rafael, bebió pediculicida que le vendieron suelto a la mamá. En todos los casos, los productos estaban en botellas de gaseosa. Los menores fueron hospitalizados y se recuperan según lo esperado para la gravedad de cada caso.

Estos seis incidentes se produjeron entre la tarde del sábado y el mediodía del domingo, encendiendo una vez más la indignación de Sergio Saracco, ex ministro de Salud y actual director de Toxicología. “No son accidentes porque se podrían haber evitado. Son intoxicaciones no intencionales, pero absolutamente prevenibles”, se lamentó el médico.

Es que resulta muy común el expendio de productos de limpieza sueltos en botellas de gaseosas o jugo, cuando debería hacerse en envases apropiados. “Los chicos no saben leer. No importa que le pongamos un rótulo que diga aguarrás. El chico ve una botella de agua con un líquido transparente y lo toma pensando que es agua. Actúan por reconocimiento del envase”, señaló Saracco, quien advirtió de que en los días de calor es cuando más casos de intoxicaciones se producen.

En general, estos incidentes tienen dos patrones comunes: los líquidos son almacenados en botellas de bebidas y son ingeridos por chicos de entre uno y cuatro años.

Menú no deseadoThinner, aguarrás, desengransantes, desinfectantes para piso, plaguicidas, líquidos para frenos, aceites, nafta, kerosén y brillapisos integran la lista de productos químicos para la limpieza y el mantenimiento del hogar o de vehículos, que provocan gravísimos problemas de salud cuando son ingeridos (ver aparte). Para colmo, dice Saracco, cada vez hay más bebidas –como las deportivas, los espumantes o los jugos– que vienen de colores llamativos, “no convencionales”, como el rojo o el celeste, “que van en contra de los propios fenómenos naturales de protección que tenemos los humanos”.

Ante esta situación, el toxicólogo insistió: “No hay medias tintas: la botella de jugo o de gaseosa ha sido pensada para contener jugo o gaseosa, no productos químicos. No basta con dejarlos fuera del alcance de los niños, en un lugar bajo llave o en un estante alto. En un segundo que saquemos la botella con líquido para pisos para limpiar, el chico puede tomar un trago e intoxicarse”, destacó.

Qué hacerAnte el hecho consumado, Saracco recomendó concurrir de manera urgente al hospital o centro médico más cercano, llevando consigo la botella con el líquido en cuestión. El funcionario aseguró que esto último es de gran utilidad para que los médicos puedan determinar qué tipo de tratamiento llevar adelante, porque “muchas veces tenemos que estar adivinando qué tomó, preguntando para qué lo compraron o para qué le dijeron que servía”.

Un grave problema se produce, por ejemplo, con la ingesta de plaguicidas, puesto que si se trata de un piretroide requiere de un tratamiento distinto de si fuera un fosforado. De igual modo, se debe evitar provocar el vómito o dar leche, entre otras acciones contraindicadas (ver aparte).

IrregularidadesPor último, Saracco pidió a la población que si va a abastecerse de este tipo de productos en sitios de venta del tipo “todo suelto”, ferreterías o similares, exija que los líquidos sean almacenados en botellas que no puedan identificarse con bebidas, tales como envases de lavandina u otros líquidos de limpieza. Pero insistió en que estos sitios deben tener autorización para fraccionar productos químicos, que las botellas deben contener una etiqueta en la que figure la composición del líquido, el número de registro de inscripción y la habilitación del establecimiento, además de teléfonos de contacto y medidas de primeros auxilios.

Alertado sobre la realidad que indica que esto no se cumple en los negocios mencionados, el toxicólogo dijo: “Es responsabilidad de los organismos de control que se cumpla con la normativa, la Provincia a través de Defensa del Consumidor en lo que tiene que ver con las normas, y a nivel municipal, respecto de las habilitaciones”.

Ante la ingesta: cada producto provoca lesiones diferentes -Thinner, aguarrás y derivados del petróleo: una sola gota que ingrese al trayecto respiratorio puede provocar una grave complicación respiratoria conocida como neumonitis química.

-Desengrasantes y otros limpiadores de pH ácido o alcalino: su ingesta produce lesiones cáusticas o corrosivas en la boca o el esófago. Las secuelas requieren tratamientos prolongados.

Qué hacer -Ir de inmediato al hospital. Llevar la botella con el líquido ingerido.

-No provocar el vómito.

-Mantener en ayunas.

-No dar leche, agua u otras bebidas.

-Si el producto salpicó la ropa, quitarla y enjuagar con abundante agua.