Sara Gonzá[email protected]
La problemática del acoso en las escuelas se ha vuelto tan frecuente que las instituciones han comenzado a contratar pólizas de seguro contra bullying.
La primera firma que vio la demanda latente por parte de los colegios fue PROME (Protección Médica Escolar), una empresa de servicios escolares que hace poco más de un mes lanzó un paquete con la idea de ponerlo en marcha para el ciclo 2015, pero fue tal la demanda por parte de las instituciones que comenzaron a ponerlo en práctica a partir de este mismo año, según expresó el vicepresidente de la firma, Fernando Farall. El paquete es muy reciente, recién se está ofreciendo en los colegios, e incluso la Dirección General de Escuelas no tiene conocimiento de la existencia de esta alternativa a la que pueden echar mano las escuelas para resguardarse ante las demandas civiles que puedan hacer los padres. Consultada la directora de Educación Privada, Liliana Jeré, sostuvo que no tenía conocimiento del tema, pero reconoció que la acción “está reflejando, sin dudas, una realidad, las instituciones se protegen ante el temor de que les hagan un juicio”. En poco más de un mes de vigencia han asegurado a cerca de 7.000 alumnos, de alrededor de una decena de colegios. La póliza es una opción a la que recurren los colegios privados para resguardarse ante futuras demandas. En el caso de los colegios públicos, si existen demandas judiciales por casos de bullying, si la sentencia determina indemnización a la víctima, el que debe pagar es el Estado. Los casos de acoso que acontecen en el ámbito escolar cada vez son más generalizados y en muchos casos terminan judicializándose. Es decir que, pese a los intentos que hacen los colegios por tratar de buscarle una solución a los conflictos, en algunos casos los padres terminan haciendo la denuncias en la justicia civil. En esos casos, en la práctica los colegios terminan siendo civilmente responsables ante los denunciantes y tienen que responder con su patrimonio a la demanda. Por esta razón es que los colegios prefieren pagar una póliza, que tiene un costo similar al de un seguro de responsabilidad civil, entre $1 y $4 por alumno, para evitar tener que pagar con su propio patrimonio una indemnización por un juicio de bullying, explicó el gerente comercial regional, Guillermo Lanata. En la mayoría de los casos, la Justicia determina, independientemente de las partes involucradas –puede ser de un docente contra otro, de un alumno con un docente o de un alumno contra otro–, si el hecho se prueba que ocurrió dentro del colegio, que la institución es civilmente responsable. “El ofrecimiento de este seguro surgió por inquietud de los propios colegios a los que les brindamos el servicio”, dijo el vicepresidente de PROME. La firma –remarca el directivo– no es un compañía de seguros sino que firma convenios con compañías aseguradoras para prestar el servicio a las instituciones, que van desde la contratación de servicios de emergencia, seguro de ART, responsabilidad civil y contra incendios hasta robos. La póliza viene a cubrir un vacío, porque los seguros de responsabilidad civil responden por los daños físicos –es decir, visibles–, remarcó el vicepresidente de PROME, pero no por los daños morales resultantes de una situación de acoso, explicó Farall, quien además es abogado. 144 casos de bull ying han sido denunciados en Mendoza entre mayo de 2013 y mayo de 2014, según la ONG Bullying Sin Fronteras. Innovacion Cubre casos de abuso sexual. Se trata de los casos en que se acciona judicialmente contra la institución por abuso sexual: la compañía también paga. La cobertura también es incipiente en todo el país Hay escasos antecedentes en otras provincias de la existencia de un seguro escolar para cubrir los casos de bullying que haya sido impulsado por el propio gobierno. Lo único que existe son pólizas como la que se comercializa en Mendoza. PROME tiene alrededor de 68.000 alumnos con cobertura en el país, desde que hace poco más de un mes lanzó este paquete. La única provincia que legisló sobre este tema fue Salta, que estableció por ley que el seguro escolar deber darles cobertura a los alumnos que son víctimas de acoso. El año pasado la cámara de Diputados de Salta aprobó un proyecto de ley para modificar el artículo 3 de la Ley Nº5.110, vinculado al “seguro escolar” de los niños que padecen bullying. El proyecto aprobado establece que el seguro escolar debe cubrir los gastos de toda la atención médica que se necesite como consecuencia de un accidente derivado de acoso o violencia escolar en el trayecto de ida y vuelta a la escuela y durante su permanencia.
Cubren el daño moralA diferencia de las situaciones donde el siniestro implica un daño físico, en los casos donde hay denuncias por acoso, en los que el daño puede ser moral, psicológico o emocional, es más complejo establecer el daño.
Por esta razón el primer paso es la denuncia judicial. “Recién cuando existe un fallo de la Justicia donde se reclama una indeminización es donde la compañía de seguros paga”, explicó el vicepresidente de PROME, Fernando Farall. “Todo se activa a partir del reclamo de un padre, luego de la denuncia judicial y por lo general, probado que el hecho ocurrió dentro del colegio, la Justicia determina que el colegio es responsable”.


