Agregó: “Hubo fallas humanas y fallas de controles y estamos trabajando en ese sentido para que no vuelva a ocurrir. Había trabajado el 911 como corresponde, pero una falla llevó a la gravedad extrema, una falla que se produzca en el sistema produce lo que ocurrió”.
Comperatore explicó que en el Centro Estratégico de Operaciones -911- no solo hay policías que atienden los llamados y que despachan, sino que hay otros que controlan este trabajo, por eso tratan de identificar quiénes se equivocaron, quiénes fueron los que no cumplieron con las órdenes o con el trabajo que tenían que hacer.
“Yo no hablaría de desidia sino que el personal trabaja mucho, el 911 recibe muchísimas llamadas, hay un montón que son falsas y muchas veces hay que descartar porque hay otras personas esperando con problemas graves”, señaló y sostuvo enfáticamente que con esto no quiere desligar responsabilidades.
“Si nosotros hubiéramos actuado, si la policía que estaba trabajando hubiera actuado no me cabe la duda que esto se podría haber evitado”, aseguró el ministro de Seguridad.
“Es una situación que nadie se imaginaba que un camión de este porte y cargado pudiera ir en contramano. Estuvo casi seis minutos arriba, los móviles estaban desplazándose y estaban llegando al encuentro cuando se produjo el accidente. Cuando un camión de este porte se sube en contramano es difícil coordinar tareas para llegar. Si hubiera estado un poco más hubieran llegado los móviles y seguramente lo hubieran sacado de la ruta, de eso estoy seguro, pero lamentablemente se dio en poco tiempo y no alcanzaron a interceptarlo”, lamentó el funcionario.