El juicio político al juez laboralista Antonio Vicente Sánchez Rey, más conocido como el magistrado de los $4,5 millones, se hará después de las elecciones de gobernador y antes de las presidenciales.

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Ahora, el Jury de Enjuiciamiento está en plena etapa de producción de las pruebas que el organismo integrado por veintiún jueces de la Suprema Corte, diputados y senadores analizará durante las audiencias.

Las mismas se realizarán en el Salón de Actos del Poder Judicial, escenario reciente de varios juicios por jurado popular pero también de la destitución por mal desempeño del fiscal Alberto Camargo en 2006 y confirmada por la Corte nacional.

En el caso Sánchez Rey se escuchará a testigos y también se analizarán peritajes médicos y contables presentados por las partes.

Todo ayudará a determinar si Sánchez Rey actuó en beneficio propio, como sostiene la acusación, cuando reclamó y estuvo a punto de cobrar $4,5 millones por un accidente laboral.

El grado de incapacidad física del juez que figura en el expediente es uno de los aspectos más controvertidos.

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El usía de 77 años, quien fue parte de la Quinta Cámara del Trabajo durante 20 años, atraviesa el cuarto mes de suspensión en sus funciones. Así lo decidió el Jury de Enjuiciamiento por unanimidad el jueves 30 de mayo último cuando mandó el caso a juicio político.

En este proceso lo representa Efraín Quevedo Mendoza hijo, quien viene de asistir a los cuatro intendentes del PJ que le ganaron al Gobierno la pulseada por presentarse a una reelección más.

Para el defensor, la acusación contra su cliente "nunca debió llegar hasta este punto y difícilmente pueda mantenerse durante el juicio político".

En el estacionamiento

Sánchez Rey se convirtió en la piedra del escándalo en 2018 cuando se supo que estaba a punto de cobrar la cuantiosa indemnización por haberse apretado un brazo con un portón del estacionamiento oficial en la parte trasera del edificio judicial de San Martín 322 de Ciudad.

Renunció por escrito pero el Gobierno rechazó la dimisión y lo denunció en el Jury de Enjuiciamiento, presentación que prosperó y avanzó hasta convertirse en el juicio político que está en proceso.