Juzgada como partícipe necesario

Pidieron 18 años para la madre de Florencia Di Marco, la niña violada y estrangulada por su padrastro

Florencia Di Marco, de 12 años, fue violada y estrangulada. Su cuerpo encontrado en un arroyo en San Luis. Su padrastro fue acusado y detenido por el hecho, pero dos semanas después se suicidó en su celda. Carina Di Marco, madre de la joven, es juzgada como partícipe necesaria de los abusos sexuales y se espera que se conozca su sentencia.

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Se trata de la nena mendocina, quien vivía en Palmira hasta que en el 2016 se fue con su madre, su padrastro y los hijos de la pareja a vivir a San Luis, donde en marzo de 2017 fue abusada y asesinada.

A dos años de su muerte, la justicia puntana juzga a su madre por el delito de partícipe necesaria en los abusos sexuales a los que fue sometida su hija. El fiscal pidió que sea condenada a 18 años y medio.

El fiscal puntano Fernando Rodríguez indicó en sus alegatos: "Tanta semejante hipocresía, la imputada sabía y vio sábanas con sangre en su casa, y no hizo nada para evitarlo, acá en este juicio escuchamos a todos, lástima que no pudimos escuchar a Florencia con el fatal desenlace”.

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Por esto solicitó que se declare penalmente responsable a Carina Di Marco por de abuso sexual con acceso carnal agravado por el vínculo por ser guardadora y por el aprovechamiento de la situación de convivencia existente, en calidad de ser partícipe necesario, por omisión.

Antes de irse de Palmira, en 2016, Florencia le habría dijo a una de sus maestras “a veces mi papá me acaricia”, lo que llamó la atención a la docente Adriana Ramírez, quien intentó hablar con Carina Di Marco, pero ella minimizó la situación, según declaró la docente.

Pero, con la muerte de Florencia, ocurrida en 22 de marzo de 2017 en San Luis, se conoció una oscura trama familiar en la cual la joven de 12 años habría sido víctima de abusos sexuales durante años por parte de su padrastro, Lucas Gómez.

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Luego de encontrar el cadáver de la joven en un arroyo de El Saladillo, a 50 kilómetros del centro de San Luis, su padrastro Lucas Gómez fue detenido como principal y único sospechoso.

El cuerpo de Florencia estaba semi desnudo y tenía signos de haber sido violada y estrangulada desde atrás. Los estudios forenses determinaron que tenía signos de abuso sexual de viaja data y también de la noche en la que fue asesinada, ya que encontraron restos de semen.

Hicieron una prueba de ADN con Gómez, la cual dio positiva, por lo que el hombre fue imputado por el aberrante hecho. Dos semanas después de su detención, el hombre murió al ahorcarse en su celda, donde estaba aislado.

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Otro de los indicios que incriminaba a Gómez fue que la noche del 22 de marzo Carina Di Marco estaba en el hospital donde dio a luz a su hijo, mientras que Florencia, y sus medios hermanos, habían quedado bajo el cuidado de Gómez.

El testimonio de tres pescadores fue clave en el comienzo de la investigación, debido a que vieron un Renault Megane negro en la madrugada en un arroyo de la localidad puntana El Saladillo, donde indicaron que por la alta velocidad a la que iba no advirtió un desnivel en el camino lo que provocó un daño en la parte delantera del vehículo.

Esto fue inspeccionado y los peritos constataron esta rotura. Además, hallaron manchas de sangre en su auto.

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