Godoy, Cepeda y Oliva, los condenados por ocho asaltos.
Sus víctimas eran ancianos. No importaba, igual los golpeaban duramente. En un mes y medio, cometieron 8 asaltos en el Gran Mendoza y ahora recibieron duras condenas tras ser juzgados.
La investigación tuvo su origen en la Justicia Federal. En el marco de una causa por secuestros extorsivos, algunos teléfonos celulares de los sospechosos habían sido intervenidos. Pero de las escuchas surgió otro dato: había una banda dedicaba a cometer entraderas.
Se remitieron los audios a la Justicia provincial y la Unidad Fiscal de Robos y Hurtos comenzó a indagar. Detectaron al menos ocho asaltos que se habían cometido en un lapso de un mes y medio.
El modus operandi era similar en todos los casos: las víctimas eran mayores de 70 años, los delincuentes actuaban con extremada violencia y armados. “Arrasaban con todo”, graficó una fuente ligada al expediente. Los botines eran diversos: plata en efectivo, electrodomésticos, joyas, prendas de ropa.
Las fiscales Florencia Díaz Peralta y Paula Quiroga lograron identificar a los integrantes banda que cometía los asaltos. Tras ser detenidos, algunos de ellos resolvieron sus condenas en juicios abreviados entre 2018 y 2019, pero quedaron tres delincuentes esperando el juicio.
El debate oral se extendió durante varios y finalizó en la tarde del miércoles con duras condenas. Juan José Godoy recibió 15 años de cárcel, Juan Marcelo Cepeda fue penado a 12 años –se unificó en 15 años con una sentencia anterior-, y a Esteban Fernando Oliva le dieron 7 años.
El juez Rafael Escot coincidió con las penas que habían solicitado durante los alegatos las investigadoras de Robos y Hurtos por ocho causas de robos con distintos agravantes –por ser cometido en poblado y en banda, por el uso de arma de fuego-.
De esta forma, los pesquisas creen haberle dado la puntada final a la banda dedicada a cometer entraderas que tuvo a maltraer a varios vecinos del Gran Mendoza.