Nunca hubo una carrera oficial de Fórmula 1 en la nieve.
La noticia de que Franco Colapinto se sumará a la escudería Williams para competir en laFórmula 1 generó una ola de entusiasmo en Argentina. Después de 23 años sin un argentino en la máxima categoría del automovilismo, el regreso de un compatriota a las pistas nos llena de orgullo. Y como el frío y la nieve son parte de nuestra esencia, surge la inevitable pregunta: ¿Alguna vez se corrió una carrera de Fórmula 1 sobre nieve?
La respuesta es un “no” rotundo en lo que respecta a competencias oficiales. Sin embargo, la historia de la Fórmula 1 tiene algunos momentos en los que la nieve se convirtió en protagonista, regalándonos postales memorables.
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Uno de los primeros encuentros entre la Fórmula 1 y la nieve fue en 1973, durante el Trofeo Internacional BRDC en Silverstone, una competencia no oficial pero que reunió a varios grandes del automovilismo. A pesar de las bajas temperaturas y una ligera nevada, Jackie Stewart se llevó el triunfo en una carrera que, aunque no contaba para el campeonato, quedó grabada en la memoria por lo inusual de las condiciones.
Dos años después, en 1975, la nieve volvió a aparecer, esta vez en la Carrera de Campeones en Brands Hatch. El temporal obligó a retrasar la largada, ya que las condiciones de la pista eran un peligro para los pilotos. Pero una vez que la nevada se calmó, Tom Pryce, al volante de su Shadow, se quedó con la victoria en medio de un paisaje que parecía más apropiado para un centro de esquí que para un circuito de Fórmula 1.
La nieve también hizo de las suyas en los tests y las presentaciones de monoplazas. En 2018, los equipos de Fórmula 1 se vieron obligados a suspender las pruebas matinales en Montmeló, Barcelona, debido a una nevada que dejó el circuito cubierto de blanco. En lugar de afinar la puesta a punto de sus autos, los mecánicos y pilotos se dedicaron a armar muñecos de nieve, en una imagen que rápidamente se volvió viral.
En Silverstone, un circuito que suele tener un clima bastante caprichoso, las nevadas durante las pruebas no son tan raras. En 2001, Renault tuvo que lidiar con una de esas tormentas que cortaron su sesión de pruebas, y en 2005, una situación similar complicó los planes de la escudería.
En las presentaciones de sus autos tampoco se salvaron de la nieve. En 1978, el equipo Arrows se encontró con una intensa nevada durante la presentación de sus nuevos modelos en Silverstone. Años más tarde, en 2012, Ferrari también tuvo que posar en medio de una nevada, con una imagen que quedó para la historia.
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Aunque nunca hubo una carrera oficial de Fórmula 1 en la nieve, los encuentros de la categoría con el manto blanco nos regalaron momentos únicos. Desde carreras no oficiales hasta tests y presentaciones, la nieve también sumó su toque especial a la historia del automovilismo.
El anuncio de Colapinto como nuevo piloto de Fórmula 1 nos llena de orgullo como argentinos, y quién sabe, tal vez algún día lo veamos correr en un circuito inesperadamente nevado, creando otro capítulo entre la nieve y la historia de la Fórmula 1.
