Un estudio nuevo apunta a que nuestra estrella nació junto con un gemelo que orbitaba alrededor del mismo punto.
El Sol es una estrella de tipo G que se encuentra en el centro del sistema solar, a aproximadamente 149,6 millones de kilómetros de la Tierra. Es una esfera casi perfecta de plasma compuesta principalmente de hidrógeno y helio, y su gravedad mantiene unidos a todos los planetas y otros cuerpos celestes en su órbita. Con un diámetro de 1,4 millones de kilómetros, el Sol es lo suficientemente grande como para albergar a 109 planetas en su superficie. Se formó hace unos 4,567 millones de años a partir de un colapso gravitatorio de una nube molecular. Su luz y calor son esenciales para la vida en la Tierra, y es la mayor fuente de radiación electromagnética en nuestro sistema planetario.