En una institución con más de 2.000 años como la Iglesia, existe el llamado sigilo sacramental, "la obligación de no manifestar jamás lo sabido por confesión sacramental", aclara la Iglesia Católica, y es algo que debe respetarse aún muerto el penitente. Pero en el estado de Oregon un hombre está en prisión por abusar sexualmente de una niña denunciado por la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días, conocidos como la Iglesia Mormona, que revelaron su confesión a las autoridades estatales. Debido a esto, la esposa del abusador hizo una demanda por 9,5 millones de dólares.
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En la demanda, Kristine Johnson dijo que su esposo confesó su abuso sexual al clero como lo requieren las reglas de la Iglesia. Esa confesión fue transmitida a las autoridades estatales, formando la base de su investigación, dijo ella en una nota de la CNN.
La mujer presentó la demanda en el Tribunal de Circuito del Condado de Marion la semana pasada y busca una indemnización por 9,5 millones de dólares por pérdidas de ingresos, angustia emocional y la pérdida de la compañía de su esposo. La demanda, que argumenta que la iglesia fue en contra de su propia política que considera confesiones confidenciales, también busca 40.000 dólares adicionales para su defensa criminal.