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El atacante, una vez consumado el abuso, le envió el contacto del chico a otro hombre con el que vivía en esa propiedad, un diseñador de moda de 24 años, quien también le propuso al menor mantener relaciones sexuales ese mismo día, en un encuentro que se concretó en horas de la noche.
Lejos de ponerle fin a la situación, al día siguiente, el menor de edad, de quien se preserva la identidad, recibió un mensaje a través de Grindr de parte de un inspector de escuela, de 52 años, con la misma intención que los otros implicados: en este caso, el sospechoso le pasó una dirección falsa y, cuando lo vio, le dijo cuál era el lugar en el que debían encontrarse .
A los pocos días, el adolescente comenzó a tener algunos síntomas como fiebre de 40 grados, dolores en articulaciones, abdominal y vómitos, por lo que el 18 de febrero fue llevado a un hospital de la ciudad de La Plata, quedando internado en emergencia y donde el personal médico le diagnosticó VIH tras la realización de varios estudios.
Los padres se enteraron de la situación, y radicaron la denuncia ante las autoridades por abuso sexual infantil, hecho que luego fue confirmado por el adolescente en Cámara Gesell. En ese sentido, el menor sufrió un severo daños psicológicos y tiene pesadillas permanentes con los abusadores.
La fiscal interviniente sostiene que los tres presuntos abusadores "violaron sistemáticamente a la víctima para satisfacer su apetito sexual, un acto de depravación", a la vez que lo incentivaron para que "no le confesara a nadie lo ocurrido a raíz de que serían despedidos" de sus trabajos.
Ferre, quien ya solicitó la prisión preventiva para los tres sindicados al juez de Garantías Mariano Caseux, afirmó: “Esto tiene vocación suficiente para dejar profundas consecuencias deformantes en la psiquis del niño, y torcer con tales conductas ilícitas el natural desarrollo biológico y sano de su sexualidad, provocando a partir de las mismas una facilitación y notoriamente extemporánea irrupción en aspectos de la sexualidad, sin tener la madurez suficiente para ello”.
Los abusadores ya se encuentran detenidos en la Jefatura Departamental de Dolores, e imputados por los delitos de “abuso sexual con acceso carnal agravado, corrupción de menores agravada, facilitamiento del acceso a espectáculos pornográficos o suministro de material pornográfico”.
Además, el docente de 37 años ya posee una causa penal anterior en su contra, por captar menores con fines sexuales a través de Internet (grooming).
Por su parte, los abogados César Sivo y Federico Fourquet, representantes legales de la familia del adolescente, reclamaron que la aplicación Grindr sea regulada por una ley que imposibilite el acceso a menores de edad.