¿Por qué las cajas de vino son un tesoro?
Caja de vino
Las cajas de vino de madera acumuladas en el hogar pasaron de ser simples envases a convertirse en verdaderos objetos de deseo para quienes buscan decorar su casa sin gastar mucho dinero
Las cajas de vino combinan tres factores que las hacen ideales para proyectos de reciclaje:
Primero que nada tienen un material resistente, especialmente las de madera, que permiten múltiples usos y duran mucho tiempo. Estéticamente, son rústicos y elegantes muy atractivas, ideales para decoraciones estilo vintage, industrial o campestre.
Y sin duda tienen un tamaño práctico, ya que su forma rectangular y profundidad las hace perfectas para almacenar o exhibir objetos. Además, muchas de estas cajas vienen con inscripciones o logos grabados que aportan un toque único y personalizado.
Con un poco de ingenio, estas cajas pueden tener múltiples usos:
- Estanterías para libros o frascos.
- Organizadores de cocina, baño o escritorio.
- Jardineras para plantas aromáticas o suculentas.
- Cajones para guardar ropa o juguetes.
- Bases para mesas auxiliares o mesitas de noche.
Una maravillosa idea de reciclaje con cajas de vino
La idea para reciclar la caja de vino
La estructura sólida de las cajas de vino permite soportar un gran peso, lo que las convierte en piezas ideales para almacenar libros, plantas, vajillas o cualquier objeto
Si buscas una idea especial, te contamos una que puedes hacer fácilmente en casa y es crear una estantería. Para ello necesitarás:
- 2 o 3 cajas de vino de madera (también puede ser cartón rígido reforzado)
- Lija
- Pincel y barniz o pintura
- Tornillos y tarugos
- Taladro o destornillador
Para poner a trabajar tus manos deberás lijar las cajas para quitar imperfecciones o astillas. Si quieres darles color, puedes pintarlas o barnízalas según el estilo de tu casa.
Ahora elegí una pared donde quieras colocarlas, puede ser en la cocina para frascos, en el living con libros o en el baño con toallas. Marca el lugar donde vas a colocar los tornillos y usa tarugos si es pared de ladrillo o cemento.
El tercer paso es atornillar las cajas por la parte trasera, asegurándote de que queden firmes. Por último, decora o llena las cajas con objetos útiles o decorativos: plantas, libros, copas, velas, etc. Y ¡listo! Tendrás una estantería original, ecológica y funcional sin gastar dinero extra.