Rituales

Por qué deberías colocar sal gruesa en las esquinas de tu casa y qué beneficios aporta

La sal es un componente con amplios beneficios para usarla en casa y en el mundo de los rituales, está cargada de simbolismo

Las tradiciones y rituales de las abuelas siguen más presentes que nunca cuando se buscaron todas las soluciones y nada funciona. Pero hay una que pocos saben y solo se trata de un poderoso ingrediente con beneficios para la casa: la sal gruesa.

Se trata de poner sal gruesa en las esquinas de la casa, es una práctica antigua que sigue ganando adeptos en la actualidad, especialmente entre quienes buscan purificar los espacios y mantener una energía positiva en su hogar.

A partir de ahora, ya no la usarás solo a la hora de cocinar y te contamos por qué.

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Poner un puñado de sal gruesa en cada rincón de la casa atraerá las energías negativas y las limpiará espiritualmente. Entre otros beneficios

Poner un puñado de sal gruesa en cada rincón de la casa atraerá las energías negativas y las limpiará espiritualmente. Entre otros beneficios

¿Por qué deberías poner sal gruesa en las esquinas de la casa?

La sal gruesa es conocida por su capacidad para absorber humedad y neutralizar olores, pero también es considerada un potente aliado espiritual para limpiar energías negativas y crear un ambiente armónico en el hogar.

Se cree que al colocarse en las esquinas, donde suelen acumularse energías estancadas, la sal gruesa contribuye a:

  • Purificar el ambiente, eliminando vibraciones densas.
  • Absorber la humedad y los malos olores en espacios cerrados. Al ser un deshumidificador natural, absorbe la humedad en rincones donde no llega tanto la ventilación.
  • Atraer prosperidad
  • Se la coloca para proteger contra malas energías y envidias. Crea una especie de “barrera”
  • Alejar malas visitas
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Cómo funciona este ritual

Si quieres aplicar este poderoso método considerado ritual, seguí estos simples pasos:

Primero coloca un puñado de sal gruesa en cada esquina de la habitación o del hogar donde sientas que la energía es más pesada o estancada.

Déjala actuar por al menos 24 o 48 horas para que absorba la humedad y la carga energética.

Luego, retírala con guantes o escoba y deséchala en la basura, también puedes tirarla bajo un chorro de agua para neutralizarla. Otra opción es quemar toda la sal que hayas sacado, para así eliminar definitivamente todo lo malo.

Repite este ritual una vez al mes o cada vez que percibas que el ambiente necesita renovarse.

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