Un truco casero con sal gruesa ideal para limpiar el inodoro
Para realizar este truco casero con sal simplemente debes seguir una serie de pasos muy sencillos, pero constantes. El principal objetivo de esta técnica es neutralizar los olores, disminuir la proliferación de bacterias y quitar las manchas de óxido.
Es un truco que debe realizarse todas las noches y durante todos los días para generar cambios progresivos y mantener la limpieza del inodoro sin tener que realizar desinfecciones profundas cada cierto tiempo.
- Coloca una taza de sal gruesa dentro del inodoro por la noche luego del último uso.
- Deja que la sal actúe durante toda la noche con la tapa cerrada.
- Por la mañana, tira la cadena para eliminar los restos de sal disuelta junto con la mugre, los microorganismos, el sarro y el óxido.
- Si quieres, refriega con un cepillo para desprender completamente la suciedad y los restos de sal del inodoro.
Otra forma de realizar este truco es con bicarbonato de sodio mezclado con sal gruesa. Ambos componentes combinan sus increíbles propiedades abrasivas y desinfectantes.
No sólo sirve para el inodoro: usos de la sal en el mundo de la limpieza
La sal posee naturalmente un poder antibacteriano perfecto para limpiar distintas superficies, retener humedad y eliminar manchas difíciles. Estas son algunas características de la sal como agente desinfectante:
- La sal elimina las manchas de alimentos quemados de las sartenes, ollas, hornos y hornallas.
- Es un elemento que elimina naturalmente los malos olores de la heladera ya que los absorbe.
- Sirve para eliminar la grasa de los cubiertos de cocina.
- La sal también sirve para limpiar pisos, muebles de madera y piezas de bronce.
- Finalmente, puedes utilizar la sal como repelente para ahuyentar insectos como las hormigas o caracoles, colocándola debajo de puertas y ventanas.