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La sal tiene propiedades que ayudan a absorber la humedad.
Para poner en práctica este truco solo debemos buscar un vaso de vidrio o una copa de cristal, llenarlo con agua y añadirle una cucharada de sal gruesa. A continuación, tendremos que hacer lugar dentro de la heladera para colocar el recipiente sin riesgo alguno de que se vuelque y ensucie los alimentos que hay en el interior (si esto sucede, incluso puede alterar el sabor de algunos productos almacenados).
En relación a esto, para garantizar la efectividad del truco hogareño, el medio citado recomienda cambiar el vaso de agua con sal cada un periodo que no sea superior a los 5 o 7 días. Puedes poner un vaso nuevo en su reemplazo, con la misma mezcla, o lavar el vaso utilizado anteriormente y preparar nuevamente la preparación de agua y sal gruesa.
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Coloca un vaso de agua con sal dentro de la heladera y dile adió a los malos olores.
Gracias a este truco, se evitará que la humedad acumulada en el interior de la heladera afecte la textura y el sabor de los alimentos, impidiendo también que se deterioren más rápido. Además, tal como te contamos anteriormente, el mal olor que emana este electrodoméstico será problema del pasado.