El uso de emojis no es solo una cuestión estética o decorativa en las conversaciones. De hecho, los emoticonos han evolucionado con el tiempo y se han adaptado a las tendencias, cambios culturales y avances tecnológicos.
Cada generación ha tenido sus propios "favoritos" al elegir cómo expresar emociones, situaciones o estados de ánimo. Esto ha dado lugar a una distinción notable entre lo que prefieren los más jóvenes y lo que utilizan los adultos mayores.
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Los miembros de la Generación X son más cautelosos en el uso de emojis y tienden a elegir los más tradicionales, como el "carita feliz", el "corazón"y el "pulgar arriba".
Aunque están familiarizados con el uso de emoticonos, suelen usar los emojis de forma más moderada y convencional. Además, prefieren una comunicación un poco más directa y menos cargada de emociones que las generaciones más jóvenes.
Para los millennials, los emojis más usados tienden a ser los clásicos y versátiles, como el rostro sonriente, el pulgar arriba, y el corazón.
Los millennials, en su mayoría, aún mantienen una comunicación emocional bastante directa, pero también han adoptado algunos de los emojis más "modernos" como el "cara con gafas de sol" y el "fuego". A menudo, sus conversaciones están acompañadas de emojis que representan sensaciones de alegría, aprobación y empoderamiento.
Los más jóvenes son conocidos por su rapidez para adaptarse a las nuevas tendencias tecnológicas y su habilidad para comunicar emociones a través de las plataformas digitales.
Para la Generación Z, los emojis que dominan son aquellos que van más allá de los tradicionales rostros sonrientes o tristes. Prefieren emojis con significados más complejos o irónicos, como el emoji del "loco", el "rostro de fuego", o el "llorando de risa".
Además, usan con frecuencia el emoji de la "mano alzada" o "boca con lengua afuera" los cuales han ganado popularidad en redes sociales como Instagram, TikTok y Snapchat.