Los trucos de limpieza han dejado hacer un fenómeno para volverse prácticamente una religión para la gente, y es que los resultados que le dan estos hacks no se han visto siquiera con los productos específicos para solucionar esos problemas. Estos trucos han llegado con una tarea clara de ayudarnos a solucionar esas situaciones que tienden a volvernos locos a diario, por más tonto que parezca.

Olvídate de tener que ver ollas nuevas para tu cocina porque las que tenés están completamente quemadas, y es que existe un truco de limpieza que te permitirá recuperarlas y que parezca que están recién sacadas de un negocio. Para poder realizar este hack vas a necesitar muy pocos ingredientes, y te darás cuenta que es verdaderamente económico.

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Recupera tus ideas quemadas con este infalible truco de limpieza

El uso diario que le solemos dar a las ollas, sumado a una limpieza un tanto errónea a la hora del lavado, pueden tener graves consecuencias en este elemento de cocina que resulta vital para cualquier hogar. De igual manera quédate tranquilo, porque todo lo quemado que tiene abajo, puede quitarse con un truco de limpieza.

Salir a comprar una olla hoy en día resulta una inversión bastante cara, e incluso eso pasa con los productos de limpieza que se especializan en la limpieza de este tipo de situaciones. Este truco casero se volverá tu gran aliado para afrontar estos problemas, resolviendo los de manera muy sencilla, y sobre todo económica.

Si bien parece una misión complicada, tranquilo porque no es imposible, así que deja de lado el drama por lo quemado de la olla y presta atención a las cosas que vas a necesitar para poder realizar este truco de limpieza que se ha hecho viral.

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Te prometimos cuidar el bolsillo, y es por eso que los ingredientes que vas a necesitar para este truco de limpieza es solo bicarbonato de sodio, o en su defecto vinagre. El paso a paso es aún más sencillo así que toma nota de lo que tenés que hacer:

  1. Cubrir la parte quemada con agua caliente y añadir dos cucharadas de sal o de bicarbonato de sodio
  2. Deja reposar unos 15 minutos y frota con un estropajo suave o un cepillo.
  3. Si las incrustaciones persisten, vacía la olla y vuelve a rellenarla con agua y sal o bicarbonato, y ponla al fuego hasta que empiece a hervir.
  4. Una vez haya comenzado el hervor retira la olla, deja que se enfríe y vuelve a limpiar la olla.