Existe una variedad o tanda de frutilla que llega prematuramente en invierno. Si bien la temporada de frutillas es durante la primavera, en los meses de frío aparece fruta primicia que se cosecha de manera temprana en algunas provincias del país.
Existe una variedad o tanda de frutilla que llega prematuramente en invierno. Si bien la temporada de frutillas es durante la primavera, en los meses de frío aparece fruta primicia que se cosecha de manera temprana en algunas provincias del país.
Las plantas de frutillas son una especie muy bonita y de fácil cultivo que se adapta perfectamente a las temperaturas de las diferentes regiones de Argentina. En un huerto familiar en el jardín, la planta de frutilla puede llegar a dar aproximadamente un kilo de fruto por cosecha.
Si tienes plantas de frutilla o recientemente compraste frutos para preparar un postre, reserva una o dos frutillas para germinar las semillas y dar vida a nuevas plantas en el jardín.
Toma nota y sigue el paso a paso de este procedimiento de jardinería artesanal en el hogar.
A diferencia de otros frutos y frutas que contienen el carozo o semilla en el interior, la frutilla tiene sus semillas en la cáscara. La planta de frutilla, científicamente conocida como fragaria, es una especie popular de la familia Rosaceae.
Para germinar semillas de frutilla en el jardín vas a necesitar frutos frescos con sus semillas verdes, o bien puedes comprar las semillas secas y limpias que te aseguran una germinación más efectiva.
Coloca las semillas en una servilleta o paño limpio, cubre con otro papel absorbente y rocía levemente con agua. Revisa cada cierto tiempo y vuelve a rociar con agua para que los brotes crezcan, pero sin ahogarlos. Utiliza muchas semillas ya que no todas van a crecer y brotar.
Una vez que los brotes tengan unos 3 o 5 centímetros, puedes trasplantarlos a una maceta en el jardín con un sustrato nutritivo y esperar a que crezcan. Es una planta que tarda en desarrollarse y dar frutos, por eso te recomiendo tener paciencia.
También puedes germinar en un frasco con algodones y papel absorbente como lo hacíamos en la escuela primaria, con esta técnica puedes controlar aún más el estado y crecimiento de la planta.