La crema pastelera es algo que le gusta a muchísimas personas. Su textura suave y su sabor delicado la hacen el relleno perfecto para gran cantidad de postres. Te compartimos la anfitriona de las recetas para que aprendas a hacer esta delicia.
Crema pastelera, la receta más fácil y económica para deleitar tu paladar.
La crema pastelera es la compañía perfecta para pasteles, facturas, profiteroles y tarteletas. Por eso, acá vas a encontrar una de las recetas más fáciles y económicas, con pocos ingredientes. Además, te damos los mejores consejos para lograr un resultado exquisito y perfecto.
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¿Cuál es el origen e historia de la crema pastelera?
También conocida como crema de confeitero o crema de vainilla, la crema pastelera tiene una historia que se remonta a la antigua cocina francesa; como no podía ser de otra manera.
A lo largo del tiempo, esta exquisitez ha sido utilizada en diversas preparaciones y ha sido parte fundamental de la pastelería tradicional europea, pero supo ser recepcionada muy bien entre los paladares argentinos. Su versatilidad y sabor la convirtieron en un componente imprescindible en innumerables recetas dulces.
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Ingredientes de la crema pastelera económica
- 500 mililitros de leche
- 4 yemas de huevo
- 100 gramos de azúcar
- 40 gramos de maicena (almidón de maíz)
- 1 vaina de vainilla o esencia de vainilla
- Una pizca de sal
Cómo hacer una crema pastelera deliciosa y fácil
- Prepará la leche infusionada: en este primer paso, verté la leche en una cacerola y agregá la vaina de vainilla (cortada por la mitad y con las semillas raspadas) o una cucharadita de esencia de vainilla. Calentá la leche a fuego medio hasta que comience a hervir. Luego, retirá la cacerola del fuego, tapá y dejá reposar durante unos 10 minutos para que la vainilla infunda su aroma y sabor en la leche.
- Mezclá las yemas y el azúcar: mientras que la leche se infunde, en un tazón aparte, batí las yemas de huevo con el azúcar hasta obtener una mezcla suave y ligeramente espumosa.
- Incorporá la maicena: agregá el almidón de maíz a la mezcla de yemas y azúcar, y batí nuevamente hasta obtener una pasta homogénea.
- Integrá la leche a la mezcla: una vez que la leche ha terminado de infundirse, volvé a calentarla a fuego medio. Cuando esté caliente (pero no hirviendo), vertela lentamente sobre la mezcla de yemas, azúcar y maicena, batiendo constantemente para evitar que las yemas se cocinen.
- Cociná la crema: volvé a colocar la mezcla en la cacerola y cociná a fuego medio-bajo, removiendo constantemente con una cuchara de madera o una espátula. La crema empezará a espesar gradualmente hasta alcanzar una consistencia suave y aterciopelada.
- Enfriá y almacená: una vez que la crema pastelera ha alcanzado la textura deseada, retirala del fuego y dejá que se enfríe por completo antes de utilizarla como relleno en tus postres. Para evitar que se forme una capa en la superficie, cubrila con papel film en contacto directo con la crema y refrigérala.
¡Listo! Ya tenés tu crema pastelera fácil y económica que hará que tus postres destaquen con su sabor y textura aterciopelada. Prepará esta receta y deslumbrá el paladar de trus familiares y amigos.