Los ministros que se quedarían y los que podrían irse si Macri es reelecto

Por UNO

En la Casa Rosada nadie quiere festejar por anticipado, menos en un contexto tan polarizado y de paridad como el que se percibe en la previa de las PASO del 11 de agosto. Hay quienes, incluso, cabuleros, se resisten a pensar más allá del 10 de diciembre, y se niegan a responder la pregunta que muchos se hacen: ¿cuál será el gabinete en el segundo mandato de Macri si es reelecto?

Más allá de esas posturas, hay algunas afirmaciones que sí se pueden hacer, y que se emparentan directamente con la estrategia del Presidente para encarar el período 2019-2023.

Dos ministros parecen tener su futuro asegurado, en caso de que haya un segundo capítulo de Macri en Balcarce 50. Se trata de Patricia Bullrich y Guillermo Dietrich. La primera, ministra de seguridad, es la funcionaria que mejores niveles de aceptación muestra en los principales informes que llegan a Gobierno.

 Embed      

Buena base de la campaña pensada por el Gobierno para las dos (o tres) elecciones que se avecinan se sustentan en la gestión Bullrich al frente de un área central para el Presidente. Sus logros en materia de lucha contra el narcotráfico, así como en la reducción de estadísticas vinculadas a casos de inseguridad, la realzan.

El segundo caso grafica al manual de ministro PRO que Macri moldea desde sus tiempos al frente de la Ciudad de Buenos Aires. Guillermo Dietrich, en Transporte, cumple perfecto el libreto.

El otro argumento del Gobierno en campaña, que más lo diferencia del kirchnerismo según los armadores del relato M, tiene que ver con la concreción de obras de infraestructura en tiempo y forma. Al frente del ministerio, Dietrich hizo pesar su gestión y por eso se convirtió en un indiscutido para Macri.

Cuando el Presidente sacó la tijera en septiembre de 2018 y redujo a la mitad los 20 ministerios que existían, se habló de la posible salida de Marcos Peña como jefe de Gabinete. Nunca sucedió, en gran medida, porque Peña es el hombre de mayor confianza de Macri dentro de la estructura de Gobierno. Imaginar un segundo mandato presidencial sin él es prácticamente utópico. Aunque, desgastado, podría cambiar su puesto a partir de diciembre.

 Embed      

En ese caso, si Peña fuera derivado a otro sector, la sucesión ofrece diferentes variantes. Este año ha tomado mucha relevancia la figura de Andrés Ibarra, actual vicejefe de Gabinete y secretario de Modernización y, especialmente, hombre de extrema confianza del Presidente, quien es su amigo íntimo desde sus años empresarios.

Ibarra ha logrado armonizar un gabinete que en algún período sufrió por internas y le dio aires renovadores a una silla que compartían Mario Quintana y Gustavo Lopetegui. El primero dejó el Gobierno, aunque su voz se sigue escuchando con atención; el segundo es el actual secretario de Energía.

“Hoy, en el día a día, el jefe de Gabinete es Ibarra”, resumen en la Rosada quienes sostienen que Peña se encuentra más abocado a la gestióny no a la coordinación y organización de las carteras.

Otra posibilidad es que el próximo jefe de Gabinete surja del riñón peronista del PRO, y tenga feedback directo con, en caso de ser electo, el futuro vicepresidente Miguel Ángel Pichetto.

En esa línea, el nombre de Rogelio Frigerio, por performance en Interior en estos cuatro años y por su buen diálogo con los diferentes actores de la política, siempre suena. Sin embargo, la posible salida hacia una presidencia del BID a partir de mediados de 2020, podría dejarlo afuera del próximo gabinete.

 Embed      

Nicolás Dujovne, como ministro de Hacienda, es otro de los que se perfila para continuar en el cargo, al igual que la actual jefa de Desarrollo Social, Carolina Stanley, y el titular de Producción, Dante Sica, que se integró al Gobierno recién en 2018.

Germán Garavano, referencia en Justicia desde 2015 e incluso en tiempos de Macri como alcalde en la Ciudad, también es valorado. Pero su decisión sería apartarse de la función política por un tiempo. El canciller Jorge Faurie, muy resaltado en las últimas semanas tras el acuerdo entre el Mercosur y la Unión Europea, tampoco tiene segura su continuidad.

Quizás el más complicado sea Oscar Aguad, ministro de Defensa, apuntado en los últimos años por irregularidades en la gestión y, especialmente, por la desaparición del submarino ARA San Juan en noviembre de 2017. La Bicameral del Congreso, esta semana, dio a conocer un informe que lo compromete relacionado con ese tema.

Fuente: El Cronista

Temas relacionados: