Buscan a esta chica raptada en Mendoza

años. Los pesquisas ya han identificado al presunto raptor y establecieron que el sospechoso usaba

el nombre de un hermano para despistar la búsqueda.

De acuerdo con la denuncia policial, Sonia Cruz (13) fue raptada el 19 de marzo de la finca

Solís, de Capiz Alto, en donde vivía con su hermana y su cuñado. Siempre siguiendo los dichos de la

hermana de la chica, quien se la llevó sería un hombre que desde setiembre del año pasado

trabajaría en la misma finca, a la que había llegado sin su pareja y con sus tres hijos menores.

Durante los meses que residió en el mismo predio, el hombre de 36 años habría entablado

cierta amistad con la menor, que tiene la misma edad que la hija mayor del sospechoso.

Según la familia de la víctima, la menor, amordazada, habría sido cargada a una camioneta que

funcionaría como taxiflet, en la que se la llevaron.

Por motivos que aún no están claros, la denuncia de la desaparición de la menor trascendió a

fines de abril, cuando la organización internacional Missing Children se sumó a la búsqueda. Desde

ese momento se solicitó el trabajo de Investigaciones del Valle de Uco, cuyos efectivos se abocaron

a rastrear al presunto raptor.

"Creemos estar bien encaminados en la búsqueda. Estamos haciendo un trabajo conjunto con la

policía de Buenos Aires, siguiendo algunas pistas que manejamos y que no vamos a precisar para no

entorpecer la búsqueda. Sin embargo, también hemos tomado contacto con investigadores de Córdoba y

San Luis como para no dejar ningún cabo suelto", reconoció ayer el comisario Alejandro Delgado,

jefe de la división de Investigaciones de la Policía.

Los pesquisas lograron identificar al sospechoso como Javier Marín (36), quien presuntamente

se hacía llamar Benjamín, tal el nombre de un hermano suyo que padece una discapacidad mental.

Este hombre y sus tres hijos de 4, 8 y 13 años, habrían vivido hasta hace al menos dos años

en una zona rural de Buenos Aires, y allí es donde ha puesto la lupa la policía. No obstante,

también se rastrean algunas zonas de Córdoba y San Luis, luego de que surgieran algunos rumores de

que pudieran estar alojándose en esas provincias.

Lo que les llama la atención a los pesquisas es que tanto el hombre como sus hijos

desaparecieron el mismo día que Sonia.

El caso quedó en manos del Primer Juzgado de Instrucción del Valle de Uco, a cargo del juez

Fernando Ugarte, quien caratuló el caso como "averiguación paradero".