En el escenario del teatro Independencia fue condecorado como mejor sommelier del mundo el sueco Jon Arvid Rosengren, quien venció en la final a la irlandesa Julie Dupouy y al francés David Biraud.
Jon, de 31 años, había ganado el título nacional en su país en 2010 y 2011, y dos años después se había alzado con la corona europea de la especialidad.
En el certamen ecuménico, que se realiza cada tres años, participaron 60 competidores de delegaciones de 58 países.
Paz Levinson, quien llegó a la semifinal, y Martín Bruno fueron los representantes argentinos.
El Concours Meullieur Sommelier du Monde se realiza desde 1969 y tiene como objetivo promover el intercambio profesional entre sommeliers destacados de destacados restoranes, bares y hoteles de todo el planeta.
La competencia constó de una prueba y allí se calificaron catas a ciegas, en la que debían describir las características y procedencia del vino, como pruebas de maridaje. Los competidores pusieron a prueba sus servicios dentro de un restoráne y también debieron responder a cuestionarios teóricos sobre cocina, vinos y temas de interés cultural.
