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Fuerte reducción de aranceles
En una declaración conjunta emitida en Ginebra, Washington y Pekín acordaron reducir sus aranceles para dar tiempo a más conversaciones. Estados Unidos los disminuirá sobre productos chinos al 30% desde un máximo del 145%, mientras que China rebajará sus tarifas sobre bienes estadounidenses al 10% desde el 125%.
“Hemos hecho progresos sustanciales entre Estados Unidos y China en las importantísimas conversaciones comerciales”, declaró el secretario del Tesoro estadounidense, Scott Bessent, a los periodistas tras las reuniones, mientras que la Casa Blanca saludó lo que calificó como un nuevo “acuerdo comercial”.
De esta forma parece tener fin el anuncio de Donald Trump del 2 de abril, cuando impuso aranceles exorbitantes a sus socios comerciales y generó temores de una guerra económica entre las dos superpotencias que podría desencadenar una recesión mundial.