China se ha consolidado como un pilar duradero de estabilidad en una economía mundial cada vez más fragmentada, afirmaron académicos y ejecutivos empresariales durante la Exposición Internacional de Importaciones de China (CIIE, por sus siglas en inglés), que este año volvió a demostrar el compromiso del país con la apertura de alto nivel y el impulso del comercio global, pese a las crecientes tensiones geopolíticas.
Un pilar clave para la estabilidad global
Ejecutivos empresariales destacan la resiliencia económica de China durante la exposición de importaciones celebrada en Shanghai
Los especialistas señalaron que, en medio de la desaceleración del crecimiento mundial y la incertidumbre en torno al comercio internacional, la CIIE se ha convertido en un ejemplo del esfuerzo de China por sostener la confianza de los inversores y compartir las oportunidades de su vasto mercado con el resto del mundo.
Sheng Qiuping, viceministro de Comercio, señaló: “China seguirá siendo una fuerza estabilizadora para la economía global, promoviendo la cooperación regional, reforzando el sistema multilateral de comercio y ofreciendo previsibilidad a largo plazo a los inversores internacionales”.
Muchas corporaciones multinacionales han profundizado su presencia en China, ampliando la innovación y la producción local para atender tanto al mercado doméstico como al global.
Una de ellas es la empresa francesa Schneider Electric, participante por octava vez en la CIIE. Este año presentó una solución de doble innovación que combina suministro eléctrico avanzado y tecnología de refrigeración líquida, ofreciendo una propuesta integral para centros de cómputo con alta densidad, resiliencia y bajo impacto ambiental.
“Tomamos China como un eje global de innovación, donde desarrollamos y validamos nuestros proyectos tecnológicos más complejos para su aplicación en todo el mundo”, indicó Xu Dong, vicepresidente y director del centro chino de energía segura de la compañía.
Xu añadió que, gracias a un sistema de innovación, manufactura y ventas totalmente integrado, un sólido equipo de ingeniería local y un centro global de innovación energética conectado con sus fábricas digitales y ecológicas, la empresa puede responder con rapidez a la demanda del mercado, acortar las cadenas de suministro y ofrecer soluciones adaptadas a las necesidades de los clientes chinos.
El fabricante japonés de indumentaria deportiva ASICS, un participante por sexta vez en la exposición, anunció que continuará ampliando sus inversiones en China, su cuarto mercado más grande después de Europa, América del Norte y Japón.
“Gracias al papel de la CIIE como plataforma de intercambio internacional, podemos no solo acercar nuestros productos e innovaciones a los consumidores chinos, sino también comprender mejor las tendencias del mercado local”, dijo Calvin Gao, director general de ASICS China.
“Esto nos permite aplicar tecnologías de vanguardia para ofrecer productos de mayor calidad y fortalecer nuestra marca en el país”, añadió.
Pese a los desafíos globales y la incertidumbre comercial, la inversión extranjera directa en China aumentó un 11,2% interanual en septiembre, según el Ministerio de Comercio.
La CIIE de este año concluyó el 10 de noviembre, tras haber registrado acuerdos previstos para un año por un valor de u$s 83.490 millones, un 4,4% más que la edición previa.
El evento de seis días contó con la participación de 155 países, regiones y organizaciones internacionales, además de 4.108 empresas extranjeras. Con más de 430.000 metros cuadrados de superficie de exposición, tanto el área como el número de expositores alcanzaron cifras récord.




