No es la primera vez que María elige tener como invitados y sentar en la mesa principal del hogar a sus canes con el objetivo de celebrar su cumpleaños, para los 89 también se tiene registros que las velitas las sopló acompañada. Es que, según su familia, "siempre tuvo una debilidad por los animales".
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Morochita mira con atención a María, en su cumpleaños número 89.
Vitoria Abencoada declaró cuando su madre cumplió 89 años: "¡A los perros les encantó participar en la fiesta de la abuela!"; para luego agregar: "Aquí se los trata como parte de la familia. Participan en todo".
Además, siente que sus perros la ven como algo más que una propietaria: es su mejor amiga.
¡Guau! Qué invitados de lujo
La frase de Lord Byron se aplica en su totalidad, ya que expresa: "Cuanto más conozco a las personas más quiero a mi perro". Es por eso que para este cumpleaños su familia colocó a cada perrito en su propio asiento, otros en sillas de bebés, uno negrito sobre un cochecito.
Complicado, pero el objetivo se logró; es así que la mujer pudo estar rodeada por sus fieles compañeritos, quienes esperaron pacientemente que sirvieran las delicias que iban a degustar.
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Los invitados vestidos acordes a la situación.
Claro, cada invitado tenía su propio plato y nada de comer con las manos. Se trató de golosinas para perritos, es decir, muchas más sanas que las papitas fritas y palitos salados que los humanos solemos consumir en este tipo de festejos. Victoria Abencoada relata la historia de María y de sus perritos en la cuenta de Instagram donde también compartió el video con el canto de "Feliz cumpleaños" en su versión portuguesa:
Lo más importante, y el objetivo de este artículo, es contarte que María pasó su cumpleaños número 91 con quien más deseaba estar: su familia...y sus perritos.