La lavanda es una planta de flores coloridas y perfumadas, pero para aprovechar esta belleza es necesario realizar una tarea de jardinería específica. Profesionales indican que si queremos gozar de un ejemplar ornamental en su máxima expresión, debemos poner énfasis en esta práctica a desarrollar exclusivamente en otoño.
Lavanda: gracias a este truco tendrás una planta fragante.
Lavanda: el truco de jardinería para que estalle de flores en primavera
Expertos en jardinería sostienen que la poda es la tarea impostergable que se debe hacer sobre la lavanda en otoño. De esta forma, se fomentará el crecimiento del ejemplar en primavera, haciendo que sus flores tengan un color más fuerte y un aroma que perdurará por mayor cantidad de tiempo. Esto siempre se debe acompañar de un abono casero repleto de nutrientes.
Especialistas señalan que si la lavanda no se poda en otoño, crecerá deforme, alargada y se partirá en la base a medida que las ramas crecen producto del peso de las flores. En consecuencia, se recomienda podar dicho ejemplar seis semanas antes de la primera helada.
Para esta tarea de jardinería necesitarás de un cuchillo afilado o unas tijeras filosas y desinfectadas. También te cuidarás las manos con guantes, evitando así que las astillas y la madera dañen tu piel. Cuando tengas los materiales a disposición, comenzarás a realizar el siguiente paso a paso:
- Cortar los tallos viejos de la lavanda unos centímetros por encima de la madera. Así tendrás una idea de la forma que tiene que adquirir la planta aromática.
- Hallar el centro de la planta (imaginariamente) para luego podar el perímetro.
- Comenzar podando por los lados, dándole forma a la lavanda para que las ramas se extiendan de manera uniforme desde la base.
- A continuación, realizar la poda de la parte superior. Si te pones de pie al lado de la planta, verás que la parte superior de la misma está a la altura de las rodillas. Tienes que cortar 3 centímetros por encima de la madera.
- Posteriormente, cortar en un ángulo diagonal a lo largo de los bordes superiores para redondear la planta.
- Finalmente, dar los últimos retoques para darle forma a la lavanda.
- Ahora tendrás que aguardar a la primavera para comprobar cómo la lavanda tiene mayor cantidad de flores, con más color y perfume.