Innumerables personas creen que lo más prudente es desechar el papel higiénico usado en el cesto de basura que se coloca en muchos baños, tanto públicos como privados. Es que además entienden que es la manera correcta de prevenir que las cañerías de las cloacas se tapen y generen los consabidos inconvenientes.
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¿Dónde hay que desechar el papel higiénico?. La respuesta es clara: en el inodoro.
Otros piensan que lo más cómodo es desechar el papel higiénico a través del inodoro, con la correspondiente descarga de agua.
La respuesta correcta es que el papel higiénico debe desecharse en el inodoro, pues si el artefacto funciona con normalidad, las cañerías no tendrían por qué taparse. Por supuesto, siempre y cuando solamente se destine el papel y la materia fecal, en cuanto a sólidos se refiere.
Sin embargo, en varios baños se ponen cestos de basura. Por este motivo mucha gente suele confundir su función y desechar ahí el papel higiénico. Pero en realidad los cestos solamente deben ser usados para arrojar apósitos femeninos, algodón y cualquier otro desecho que pueda producirse en el baño, pero no el papel higiénico.
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Justamente, si los elementos nombrados en el párrafo anterior -a excepción del papel higiénico- se arrojan al inodoro, entonces las posibilidades de que las cañerías se tapen serán inevitables.
Hay que saber que el papel higiénico está pensado y diseñado para desintegrarse con facilidad en contacto con el agua; y de esta forma, eliminarlo, según explica el sitio oficial de la empresa Elite Argentina. Pero hay que tener cuidado de no arrojar demasiado papel, de modo tal que, al mezclarse con la materia fecal pueda producir un tapón.
En cambio, cuando desechamos papel en un cesto de basura, el mismo queda ahí por horas -incluso más de un día- en contacto con el aire y puede propagar enfermedades, además de mal olor y suciedad.