Cerca de 25 efectivos estaban en la puerta del aguantadero en el barrio Lihué esperando la orden de allanamiento para ingresar. Sin embargo, los delincuentes lograron escapar. La pregunta que queda en suspenso: ¿los delincuentes huyeron
Por Fabricio Panella Vidal
Escaparon los tres ladrones que se habían refugiado en una casa del barrio Lihué después de robar este lunes un taller mecánico en Godoy Cruz.
Luego de esperar unas dos horas en la puerta del aguantadero, llegó la orden de allanamiento y los 25 efectivos ingresaron a la vivienda señalada como escondite de los maleantes en Guaymallén.
Cerca de las 20, el ministro de Seguridad, Carlos Aranda, enfrentó a la prensa para anunciar una mala noticia: los delincuentes habían huido dejando dentro del lugar una camioneta sustraída del taller, gracias a la que los investigadores ubicaron el escondite.
La Jueza de Garantías Alejandra Mauricio aseguró que no hubo demoras de su parte para librar la orden de allanamiento. Especificó que a las 18.35 le ingresó el pedido y libró la orden a las 18.57 por soporte informático y con firma digital.
El gran operativo de la Policía comenzó cerca de las 18, cuando detectaron el lugar exacto en donde estaba la Toyota Hilux sustraída en Godoy Cruz.
Cerca de 25 uniformados rodearon la vivienda (que consta de tres departamentos internos) y se quedaron esperando la autorización de la Justicia para ingresar, situación que se hizo efectiva pasadas las 19.
El atraco sucedió a las 16. En un primer momento se había dicho que todo había ocurrido en una casa de familia pero más tarde el ministro de Seguridad, Carlos Aranda, confirmó a este diario que el asalto se perpetró en un taller mecánico ubicado en la calle Balcarce 559 de Godoy Cruz.
Tras sorprender a los clientes y al dueño de “Ruiti”, los tres ladrones se hicieron de 4.000 pesos y huyeron en la camioneta de uno de los civiles.
Tal vez no se percataron de que la Toyota Hilux pertenecía a una empresa de alquiler de automóviles, los cuales por lo general cuentan con un servicio de seguimiento satelital por seguridad. El ocasional conductor casualmente la había llevado a reparar a ese taller en el momento del asalto.
Sin notar el logo de la firma en el rodado, los malvivientes huyeron a toda velocidad, se escondieron en la casa 2 de la manzana 7 del barrio Lihué e ingresaron allí la camioneta, a donde llegó la policía gracias al GPS instalado en la 4x4.
A pesar de los contratiempos, el trío de delincuentes se salió con la suya. Lo único que los efectivos pudieron tomar de ellos fue un bolso con dos pistolas 9 milímetros, y sus respectivos cargadores, en su interior.
