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La velocidad de propagación en el mar de un tsunami o maremoto es de más o menos 800 km/h. Masas de agua gigantes bajan rodando por el relieve marino, a diferencia de las olas ordinarias que sólo afectan la superficie del agua. El 26 de diciembre de 2004,

Qué es un tsunami y cómo se produce

Por UNO
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PARÍS, 11 marzo (AFP-NA) -- Los tsunamis, como el que golpeó este viernes el noreste de Japón, sonprovocados por terremotos submarinos que afectan esencialmente las zonas de importante actividad

tectónica, como algunas regiones del Pacífico y de Asia.

La onda del tsunami, que nace del choque sísmico de la masa oceánica que va de arriba hacia

abajo, tiene un espesor de varios cientos de metros y va ganando energía cada vez que impacta el

fondo submarino.

La velocidad de propagación en el mar de un tsunami o maremoto es de más o menos 800 km/h.

Masas de agua gigantes bajan rodando por el relieve marino, a diferencia de las olas ordinarias que

sólo afectan la superficie del agua.

Una ola que se propaga por el mar pierde muy poco de su energía.

Por lo tanto, puede alcanzar distancias considerables y destruir costas situadas a miles de

kilómetros del lugar en donde se inició.

En 1960, un terremoto en Chile de magnitud 9,5 grados provocó un maremoto devastador que

alcanzó las costas de Japón. Cuando en las cercanías de la costa el fondo es elevado, la velocidad

de la ola disminuye, pero genera un aumento de su altura, pudiendo alcanzar hasta 20 metros.

Los principales países ribereños del Pacífico intercambian sus observaciones para advertir

los peligros de esas olas oceánicas. Dichas informaciones son coordinadas en un centro de alerta en

Hawai (Estados Unidos).

Si bien la mayoría de los tsunamis se producen después de un sismo, existen otros orígenes

posibles, según el geofísico y especialista francés de los tsunamis Emile A. Okal, como las

avalanchas submarinas, provocadas a veces por sismos como en Papuasia-Nueva Guinea en 1998 (2.000

muertos), la explosión de un volcán, como en Krakatoa, pequeña isla entre Java y Sumatra (36.400

muertos en 1883), o la caída en el mar de un asteroide.

Otros pequeños maremotos pueden ser provocados por fenómenos meteorológicos, en particular

repentinos e importantes cambios térmicos que provocan depresiones y que generan a su vez violentos

vientos.

El 26 de diciembre de 2004, las costas de una decena de países de Asia fueron afectadas por

un tsunami que provocó 220.000 muertos.