La mexicana logró que le pagaran el viaje al Reino Unido. Pero no la dejaron entrar al país por falta de dinero y hospedaje.

Esta joven hizo una huelga de hambre para ir a la boda real de Kate y Guillermo

Por UNO

Una joven mexicana que estuvo 16 días en huelga de hambre para conseguir ser invitada a la boda del príncipe Guillermo y Kate Middleton logró viajar hasta el Reino Unido pero, cuando su historia parecía llegar a un final feliz, no se le permitió la entrada al país.

Parecía que iba a alcanzar su objetivo gracias al patrocinio del mexicano Octavio Fitch Lazo. Lo había logrado. O casi. Estibalis Georgina Chávez no pudo ingresar al Reino Unido por carecer de suficiente dinero para solventar sus gastos y de un lugar para hospedarse.

La joven, de 19 años, fue devuelta a Madrid, donde había realizado la escala con rumbo a Londres, y permanece allí con la esperanza de obtener más ayuda para poder regresar a la capital británica antes de la boda real.

Al parecer no solo a México le cuesta darse cuenta de que esa "niña vale más que el dinero, es una verdadera artista y sabe luchar por sus sueños", dijo Fitch Lazo, quien contribuyó con 15.000 pesos mexicanos, unos 1.270 dólares, para el pasaje aéreo de Chávez.

A partir de la negativa de las autoridades británicas, la joven se mueve "lo más rápido posible" para conseguir dinero y un lugar donde hospedarse durante su estadía en Londres al menos hasta el 29 de abril, cuando se celebrará la boda en la Abadía de Westminster.

Desde la capital española, la joven aseguró que se encuentra bien y aún con "esperanzas" de poder cumplir su sueño, ya que solo necesita "demostrar ingresos y un lugar donde dormir" en Londres.

Asistir a una boda de la monarquía británica fue el sueño de toda su vida y asegura que la admiración que siente por la fallecida princesa Diana (1961-1997), madre de Guillermo, la lleva desde muy chica en la sangre. "Mi madre me enseñó a quererla desde que tengo uso de razón", aseguró.

Además del ayuno realizado en febrero pasado, Chávez inició la venta de una serie de cuadros que pintó sobre la realeza y envió algunas cartas a medios de comunicación y asociaciones civiles para conseguir patrocinios.

Pero solo pudo concretar el viaje cuando Fitch Lazo llegó en su ayuda. "Me dio lástima que la gente la atacara, en vez de darse cuenta de que es una niña humilde con ganas de salir adelante, pero además me gustaron mucho sus cuadros y tuve la oportunidad de ayudarla y lo hice", explicó.