Cada Viernes Santo, segundo día del Triduum pascal que terminará el domingo, decenas de miles de cristianos del mundo entero realizan un peregrinaje a la Ciudad Vieja de Jerusalén, en el sector oriental de mayoría árabe ocupado por Israel desde junio de 1967.
Al acercarse estas fiestas para los cristianos y los judíos, Israel anunció el cierre, del viernes al domingo, de los puntos de control que permiten el acceso a su territorio desde Cisjordania ocupada, limitando el acceso únicamente a los casos humanitarios.
Como todos los años, Israel autorizó a 500 cristianos de la franja de Gaza a ir a Israel y Cisjordania ocupada durante la Pascua. Más de 20.000 cristianos de Cisjordania recibieron un permiso especial para visitar Jerusalén hasta el fin de la semana próxima, según un comunicado militar.
Los cristianos representaban más de 18% de la población de Tierra Santa en 1948, fecha de la creación del Estado de Israel, pero actualmente son tan solo 2%.
Fuente: AFP-NA