Gustavo Arenas, jefe del bloque del PJ en Diputados, aseguró a este portal que "no se trató de una convocatoria espontánea". Como contrapartida, la oposición afirmó que "el gobienro debería reflexionar", según aseguró su par radical

Opositores y oficialistas cruzaron dardos por la masiva marcha

Por UNO

Luego del cacerolazo producido este jueves en Mendoza y en otras ciudades argentinas, ni el oficialismo local ni la oposición lograron ponerse de acuerdo en las causas y efectos de la masiva protesta.

Para Gustavo Arenas, presidente del bloque de Diputados del PJ en la provincia, la protesta debería ser leída por las fuerzas opositoras.

"No me parece que haya sido una convocatoria espontánea, aunque esto no deslegitima la protesta. La pregunta es quién canaliza este descontento. Me parecer que es un problema de la oposición, que no puede articular esos intereses. Estas minorías deberían ser representadas y hoy por hoy la oposición no pudo capitalizar" estas manifestaciones, explicó Arenas.

"Cualquiera puede dar su parecer pero esta forma es antidemocrática. Pienso que algunos sectores ven afectados sus intereses. La presidenta está del lado de los sectores más postergados y esto puede molestar. Igual el método no me gusta porque va en contra de los poderes establecidos democráticamente", opinó el titular del bloque oficialista.

En tanto, Néstor Parés, jefe de la bancada radical en la Cámara Baja, consideró que el que tiene que tomar nota es el gobierno.

"La gente tiene bronca y la expresa como puede. Encima los dichos de la presidenta de que los cacerolazos no la pondrán nerviosa no ayudan. El gobierno debería reflexionar", indicó el legislador, que negó alguna responsabilidad opositora en el asunto: "La oposición tiene que hacer lo que tiene que hacer. Nosotros estamos haciendo nuestro camino día a día".