ordinarias de ambas cámaras. El rector de la UNCuyo, Arturo Somoza, le facturó así al Gobierno que ningún funcionario hayaasistido la semana pasada al lanzamiento de los actos por el Bicentenario que realizó esa casa deestudios. Esto trascendió a través de fuentes del Rectorado, que excusaron al rector de darexplicaciones públicas. "Fue una devolución de atenciones", esbozaron los informantes. Esto también fue ratificado por el intendente de Godoy Cruz, Alfredo Cornejo, a quien no lesorprendió la ausencia de Somoza, "porque se sabe que la UNCuyo no está de acuerdo con el trabajoconjunto con este gobierno", tal como señaló. En el Arzobispado de Mendoza, en cambio, no hubo explicaciones oficiales ni extraoficialesacerca de la falta de representación institucional en el acto legislativo. Diario UNO intentó comunicarse en reiteradas oportunidades con voceros de monseñor José MaríaArancibia, pero no hubo respuesta. Mientras, en el grupo de diputados nacionales fueron evidentes las sillas vacías que dejaronOmar De Marchi (PD), el sanrafaelino Omar Félix (PJ), el kirchnerista Jorge Pampa Alvaro, eltitular del Centro Empleados de Comercio (CEC), Guillermo Pereyra, y los cobistas Enrique Thomas,Ricardo Mansur y Sergio Pinto. El ganso es uno de los habituales y más ácidos críticos de los últimos discursos de aperturade sesiones, no sólo en la gestión de Jaque, sino también en la de Cobos. En tanto, Félix noretribuyó la atención que tuvieron el gobernador y sus principales ministros en la recienterenovación de autoridades del PJ de San Rafael. Mientras, Alvaro, a pesar de su afinidad con el oficialismo nacional, nunca comulgó con elperonismo mendocino. Este año, el sindicalista Pereyra, un aliado estratégico del gobernador, no asistió a laLegislatura y tampoco se hicieron presentes los militantes de su gremio entre los aplaudidores deJaque, quienes en el acto legislativo del 2009 tuvieron un gran protagonismo. Entre los senadores, la única que no asistió fue la cobista Laura Montero. Otra notoria ausencia fue la del intendente de Capital, Víctor Fayad, sindicado como el mejoraliado opositor del oficialismo local. Aunque tampoco fueron de la partida el sancarlino JorgeDifonso (PD) ni el tunuyanino Eduardo Giner (UCR).
Afuera hubo manifestaciones"¡Fuerza, Celso!", alentaban unos 70 aplaudidores del gobernador desde el frente de la Legislatura mientras, a una cuadra de distancia, en Espejo y Patricias Mendocinas, lamultisectorial de trabajadores estatales acusaba al mismo hombre de ser el responsable del "saqueode la provincia". Aunque con menos fuerza que el año pasado, los grupos pro y contra Celso Jaqueestuvieron cerca de la Casa de las Leyes mientras el mandatario leía el discurso anual de aperturade sesiones ordinarias. Frente al debilitamiento de los grupos de protesta, favorecido por el cierre de la discusiónsalarial con el sector estatal –salvo por los médicos aglutinados en AMPROS, que siguen enconflicto–, se relajó la movilización del oficialismo provincial. Sin embargo, casi como un símbolodel 1° de Mayo, los grupos antagónicos tuvieron su minuto de fama ayer a la mañana. Además, desde antes que entrara el gobernador al Palacio Legislativo se manifestaron desde laplaza Independencia las 50 familias que serán desalojadas en los próximos días porque ocupan unaestación ferroviaria que será refuncionalizada. El grupo de efusivos admiradores del gobernador fue referenciado con el Movimiento de UnidadPopular (MUP) por fuentes oficiales. Por una gestión de Daniel Pereyra, director del Instituto deJuegos y Casinos, la seguridad le permitió a este grupo pasar las vallas instaladas en Sarmiento yEspaña para alentar con bombos desde el frente de la puerta principal de la Legislatura. Pablo Cazabán, hermano del influyente secretario general de la Gobernación, fue designadopara controlar que los aplaudidores no se desbordaran mientras transcurría el acto oficial.