En cuestión de minutos trascendió que Jaque había sufrido una descompensación, que losprimeros aventurados se la adjudicaron a los sinsabores que la máxima autoridad provincial tuvo quepadecer la semana pasada por la pelea con su vice Cristian Racconto, sumados a los nervios previosal discurso del 1° de Mayo. Con el correr de las horas, voceros del Ejecutivo se encargaron de aclarar que Jaque sólohabía sido sometido a un chequeo de rutina."Llegó en su auto, y no en ambulancia, pasado el mediodía y se fue una hora más tarde. Le realizaron análisis de sangre y una radiografía de pulmón, que es lo que el ministro de Salud,Carlos Behler, le había recomendado tras notarlo con cierta congestión", aclaró a Diario UNO PabloCatania, vocero oficial, quien con eso desterró las versiones que señalaban una internación urgentedel gobernador. ¿Por qué la intervención médica fue solicitada un día antes de la apertura de sesiones? SegúnCatania, porque Jaque estuvo toda la semana incubando un cuadro gripal y el viernes a la mañana,cuando se cruzó con el titular de Salud, éste le habría preguntado: "¿Celso, hace cuánto que no tehacés un chequeo general?", y la respuesta fue la visita del malargüino a la clínica citadina. Recién mañana estarán listos los resultados de la consulta. Aunque, aparentemente, la vida dela máxima autoridad local marcha sobre ruedas. Es que, después de visitar al médico, el mandatario habría retomado su rutina con un "pastelde papas hecho por su esposa" para almorzar antes de la siesta reparadora y la preparación de sudiscurso, con la que ocupó la tarde del viernes.