MALARGÜE– Los primeros fríos del año volvieron a poner sobre el tapete un problema que viene padeciendo el departamento desde la última década: la falta de gas natural.En la jornada de ayer la única estación de servicio que vende GNC, Servicentro Esso, informó –mediante un comunicado radial– que se veía imposibilitada de expender ese combustible por la restricción impuesta por parte de la Distribuidora de Gas Cuyana.Paralelamente, se tomaba conocimientos de que a las industrias yeseras ubicadas en el sector este de la ciudad se les había indicado el viernes pasado la misma medida, por parte de la misma distribuidora y que por ese motivo no podían hacer funcionar sus hornos de deshidratación de mineral.Una de esas fábricas comunicó al personal la posibilidad de adelantarles licencias, si la medida se extendía a la semana próxima. Ese fue el motivo por el cual un grupo de delegados de la Asociación Obrera Minera Argentina se entrevistó con autoridades municipales para solicitarles su intervención para conocer explicaciones sobre los cortes de gas.Al retirarse del encuentro los gremialistas consignaron que el intendente Agulles se había puesto en contacto con autoridades de Ecogás, quienes le trasmitieron que la falta de combustible está motivada por los problemas de provisión que se registran a nivel nacional. Por lo tanto, “de 19 camiones que llegan normalmente con gas licuado de petróleo, que luego se inyecta a las cañerías domiciliarias, sólo lo harían 15 y que para no afectar la calefacción de los hogares se había cortado el suministro a las yeseras y la estación de servicio”.La paralización de la actividad es por siete días, a los que deben sumarse otros cuatro que hubo en abril, aparentemente por la misma razón. Ello se tradujo en gestos de preocupación de los delegados al abandonar el palacio municipal.El jefe comunal ofreció una conferencia de prensa, en la que informó que conversó telefónicamente con funcionarios de Ecogás, quienes le transmitieron que en las primeras horas de la tarde llegaron los primeros camiones “que estaban retrasados por condiciones climáticas en Neuquén”. Esa demora, sumada al aumento del consumo domiciliario habrían sido los motivos por los cuales se tomaron “las precauciones de corte” a fin de no afectar al grueso de la población.Agulles indicó que “la falta de gas es un problema nacional, por eso es que se ha armado un cronograma racionando la distribución en todo el país”.Más adelante, señaló que puso al tanto del tema al gobernador Jaque y al subsecretario de Combustibles de la Nación para que realizaran gestiones a fin de rever el cronograma de provisión para la planta de Malargüe. “La idea es que trabajemos todos para que se restablezca rápidamente el servicio”, dijo el intendente.Finalmente, dio cuenta de un acuerdo para cortar el servicio desde las primeras horas de la tarde a “algunos edificios públicos como el polideportivo, residencia deportiva, para priorizar el consumo domiciliario”.Desde la distribuidora, si bien no hubo un parte oficial, se dieron explicaciones coincidentes con las afirmaciones del intendente.
Mendoza
Con los primeros fríos intensos, ese departamento volvió a padecer restricciones en este servicio. “
Se debe a una problemática nacional”, dijeron las autoridades.