El primero en la lista es el ministro de la Producción, Raúl Mercau. Los senadores JuanCarlos Jaliff, César Biffi y Armando Camerucci firmaron un proyecto de resolución pidiendo que selo para que clarifique las acciones de Mendoza en torno al conflicto de la promoción industrial. Mañana intentarán que se apruebe dicho proyecto, de modo tal que Mercau explique en laLegislatura cuál es el camino que tomará Jaque para terminar con el caso sin que Mendoza se veaperjudicada. Las sospechas de los senadores radicales están fundadas en las últimas publicacionesperiodísticas,en las que sobre todo los gobernadores de la provincias vecinas auguraban el fin delconflicto. "¿Pero, cómo tan rápido se habla de un acuerdo,cuando Mendoza planteó una posición dedefensa absoluta en contra del promoción?", se preguntaron los senadores de la oposición. "Esto nos lleva a pensar que el gobernador está cediendo terreno en esta pelea para solucionar un tema acuciante, la falta de recursos –especularon los senadores– si Mendoza noarregla por la promoción no podrá firmar el convenio para que la Nación se haga cargo de su deuda",recordaron.
Obras públicas, en la mira Otro tema sobre el que el radicalismo reunificado estará poniendo el ojo serán las obraspúblicas. Promediando ya la segunda parte del año, buscarán saber cómo se ha desenvuelto el ritmode obras durante este año. Otro tema que suele generar cortocircuitos clásicos entre oposición yoficialismo. En Diputados no se quedarán atrás. Si bien las principales embestidas hasta ahora salierondel Senado, el jefe del bloque del CONFE, Andrés Marín, es consciente de que "si tenemos 19integrantes y nos abroquelamos con una misma postura el oficialismo no tendrá dos tercios nuncapara poder sesionar. Esto implica un doble desafío y una gran responsabilidad". Más conciliador, el jefe de los diputados radicales Alejandro Molero, ponderó la necesidad de"abrir canales de diálogo con el oficialismo". En el Senado dos peso pesado conducen los bloques que van camino a la reunificación. Elradical Armando Camerucci sostiene que parte de las fortalezas que ahora pueden mostrar "son partede un proceso de maduración interna y externa que comenzó hace varios meses y que ahora muestra susfrutos". Por otro lado, el cobista Juan Carlos Jaliff tiene claro que la unificación partidaria les dafortaleza para marcar posición en temas claves. "Hemos venido trabajando juntos desde el año pasadoen temas como el presupuesto y el endeudamiento, ahora se debaten temas que trascienden a unagestión como OSM, el petróleo, el endeudamiento y por lo tanto queremos participar". El escenario legislativo a partir de ahora no tendrá variantes numéricas, pero el radicalismomostrará más quilates para marcar la cancha del oficialismo respaldado en la unidad trabajosamenteconseguida.
Ya habían comenzado la semana pasada Desde la semana pasada, se comenzaron a notar las primeras acciones en el Senado, que buscanatacar los flancos más débiles de la gestión de Celso Jaque. Por un lado, pidieron que el ministro de Infraestructura, Francisco Pérez, vaya al Senadopara plantearle que quieren intervenir en la renegociación de los contratos de las áreaspetroleras. No tuvieron suerte porque los números jugaron a favor del oficialismo y los votos noalcanzaron. Al mismo tiempo, el ARI también le reclamó públicamente al gobernador que la Legislaturatenga participación en dicha renegociación. En segundo lugar, pusieron la alarma sobre los números de la Provincia. En la sesión delmartes pasado provocaron el enojo del Justicialismo que terminó por levantar la sesión cuando elbloque de la UCR, a través de su jefe Armando Camerucci, puso el dedo en la llaga, al decir que elGobierno se verá en serios problemas para afrontar el pago de los sueldos en el mes de setiembreporque no logra recibir los fondos prometidos desde la Nación. Al día siguiente, la embestida fue contra el ministro de Salud, Juan Carlos Behler queterminó retirándose enojado de la comisión de Salud a la que había sido citado, cuando le llovieroncuestionamientos sobre su gestión.