Arreglo extrajudicial

La letra chica del acuerdo de IMPSA para patear su megadeuda hasta 2044

El principal accionista de IMPSA acordó con sus acreedores para reperfilar la deuda de más de 560 millones de dólares con la que se privatizó la empresa

Industrial Acquisitions Fund LLC (IAF), grupo inversor y principal accionista de IMPSA S.A., llegó a un acuerdo extrajudicial de reestructuración de deuda para “patear” vencimientos hasta el 2044.

Ese acuerdo preventivo (APE) ya fue presentado en el Segundo Juzgado de Procesos Concursales de la Provincia de Mendoza con el objetivo de mantener la paridad entre los acreedores y asegurar que la reestructuración resulte vinculante para todos.

Según informó IMPSA a la Comisión Nacional de Valores, el acuerdo no prevé quitas de capital, sino un reperfilamiento de plazos. Es decir, implica que cada acreedor recibirá nuevos instrumentos de deuda en dólares conservando el valor nominal original de cada deuda elegible –más los intereses devengados hasta el cierre-.

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La ministra Jimena Latorre y el gobernador Alfredo Cornejo junto al mendocino Pablo Magistocchi, country manager de IMPSA; y Jason Arceneaux, cara visible del grupo inversor IAF.

La ministra Jimena Latorre y el gobernador Alfredo Cornejo junto al mendocino Pablo Magistocchi, country manager de IMPSA; y Jason Arceneaux, cara visible del grupo inversor IAF.

Las claves del acuerdo al que llegó IMPSA

La clave del acuerdo al que llegó IMPSA pasa por los plazos de vencimiento de esos títulos de deuda: el capital se amortizará en 9 cuotas anuales iguales (11,11%) pero a pagar recién a partir del 31 de diciembre de 2036; culminando los pagos a fines de 2044.

Estos nuevos títulos de deuda devengarán intereses compensatorios a una tasa del 1,5% nominal anual, sobre saldos pendientes de capital, desde la fecha de cierre de la reestructuración.

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Jorge Salcedo Hernández, presidente de IMPSA tras la privatización.

Jorge Salcedo Hernández, presidente de IMPSA tras la privatización.

El que se devengue desde ese momento hasta el 31 de diciembre de 2027, se capitalizará y pasará a formar parte del capital del nuevo título de deuda sobre el cual se calcularán los intereses futuros.

Entre el 1 de enero de 2028 y el final de 2032, los intereses se pagarán semestralmente de la siguiente forma: 50% en efectivo; y 50% se capitalizará.

Ya a partir del 2033, IMPSA acordó pagar todos los intereses en efectivo (los generados por el nuevo título de deuda más los capitalizados).

Esta propuesta de reestructuración ordenada y sin quitas, con pagos diferidos y capitalización parcial de intereses necesita el ok del juzgado, por lo que la propia IMPSA -que alguna vez fue nave insignia de la industria nacional- se comprometió a mantener a sus acreedores y proveedores informados acerca del devenir de las actuaciones judiciales, “así como los términos específicos de la oferta de APE a presentarse y la convocatoria a las respectivas asambleas de obligacionistas y bonistas”.

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