Se llama Danny Polaris y es un destacado cantante de Jazz del Reino Unido. Lleva cerca de dos semanas con una erección causada por una droga inyectada directamente en su pene y corre serio peligro de amputación.
Todo empezó cuando el artista se tomó un viagra para mantener su miembro firme con el fin de acostarse con un enfermero que había conocido en un pub.
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Todo iba de perfecto hasta que, sin fiarse del todo el efecto que la pastilla azul provoca en las gónadas masculinas, decidió asegurarse sacando la jeringuilla y pinchando su miembro con esa sustancia.
Al día siguiente, el cantante notó que su pene seguía erecto, pero no le dio importancia. Se colocó un enfriador de botellas alrededor de sus genitales a ver si así lograba que bajara la erección. Pero aún así no obtuvo resultado alguno. Ello no impidió que cambiase sus planes y agarró los bártulos y se fue a celebrar el Pride de Berlín.
Dos días después, la erección era tan evidente (y preocupante) que tuvo que recurrir a una ambulancia para que lo trasladara al hospital más cercano, donde continúan tratándolo.
Los médicos han intentado drenar la sangre acumulada en su miembro por una vena cercana a la pierna. Además, podría perder la funcionalidad de sus genitales e, incluso, la amputación de los mismos.
Sus amigos han hecho un crowdfunding para cubrir los gastos médicos y otros, el cantante ha dado las siguientes declaraciones: "Fue una de las peores decisiones de mi vida. Algunos días me despierto y lloro por lo estúpido que fui, por lo que he perdido, y por lo que me puede pasar".
Fuente: América24
