A raíz de la llegada de un nuevo electrodoméstico, el tender comienza a desaparecer de las casas argentinas. ¿Cuál es la nueva tendencia?
El tender de la ropa puede ser reemplazado por una nueva tendencia.
Una nueva tendencia llegó para dejar al clásico tender de colgar la ropa en el pasado, algo que en algún momento fue completamente impensado por todos los argentinos. En concreto, se trata de un nuevo electrodoméstico similar al lavarropas.
El secarropas es la tecnología que cada vez se ve más en las casas argentinas. Esto se debe a factores como el horro de tiempo, la comodidad al no depender del clima y la eficiencia energética, por nombrar algunas de las características.
Hoy, cada vez más familias optan por comprar este electrodoméstico, ya que puede resultar más práctico. Estos reemplazos surgieron en departamentos chicos, donde el lugar es limitado, o en lugares donde la humedad es la principal protagonista.
Los expertos en diseño de interiores aseguran que la clave está en aprovechar cada metro cuadrado. Además, destacan que estas soluciones aportan modernidad y orden a las casas. Particularmente, los beneficios del secarropas son los siguientes:
Con el aumento de la urbanización y los estilos de vida ajetreados, los electrodomésticos que simplifican las tareas domésticas como el secarropas se han vuelto más necesarios. ¿Pondrías uno de estos en tu casa?
El precio de los secarropas varía según el tipo, la capacidad y la marca, con opciones que van desde aproximadamente $180.000 para modelos centrífugos hasta más de $500.000 para los de calor por ventilación o condensación.
Los secarropas centrífugos son generalmente la opción más económica y compacta. Suelen tener una capacidad de entre 5,5 kg y 6,5 kg y funcionan extrayendo el agua de la ropa mediante fuerza centrífuga.
Por el contrario, los secarropas a calor, ya sea por ventilación o condensación, son más costosos, pero ofrecen un secado completo. Son modelos de mayor capacidad (a partir de 7 kg) y suelen incluir funciones adicionales.