Ingenieros japoneses aceptaron que la única manera de prevenir una catastrófica fuga de radiación desde un reactor dañado en la planta nuclear de Fukushima podría ser enterrarlo bajo arena y concreto, el método usado para sellar enormes filtraciones desde Chernóbyl en 1986, publicaron varios diarios y agencias de noticias.
Ingenieros japoneses aceptaron que sería la única manera de evitar una fuga de desde un reactor dañado. El establecimiento quedaría bajo arena y concreto. El método fue usado para sellar enormes filtraciones en Chernóbyl, en 1986