Para poner en marcha el sistema, los residentes del complejo residencial de 485 viviendas abonarán 200 dólares a la empresa DNA Pet World Registry para que archive la información genética de los perros, que llevarán un collar con la identificación respectiva.
Una vez que los datos sean almacenados, se tomarán muestras de los "pasteles" de caca sin recoger halladas en las áreas comunes, las cuales serán enviadas a esta compañía para su análisis.
Según la asociación de vecinos, para limpiar excrementos de perro abandonados gastan entre 10.000 y 12.000 dólares.
Fuente: DiarioVeloz.com