El representante legal de Anders Behring Breivik consideró también que el sospechoso está "demente". Breivik admitió responsabilidad en el atentado en Noruega y dispararle a jóvenes que asistían a un campamento del Partido Laborista en una i

El supuesto asesino se drogó antes de la masacre para sentirse "fuerte, eficiente y despierto", dijo el abogado

Por UNO

El sospechoso de los atentados en los que murieron al menos 76 personas en Noruega asegura formar parte de una organización con varias células en países occidentales, pero el caso deja entrever que está demente, dijo el martes su abogado, quien agregó que el sujeto tomó drogas antes de iniciar la masacre para sentirse "fuerte, eficiente y despierto".

Anders Behring Breivik no está al tanto del número de víctimas ni de la respuesta del público a la masacre que ha sacudido en Noruega, pero cree que la "operación" se desarrolla de acuerdo a lo previsto, dijo el abogado Geir Lippestad. En entrevista con The Associated Press, Lippestad dijo que el sospechoso preguntó cuántas personas mató.

"Todo el caso indica que está demente", le dijo Lippestad anteriormente a reporteros durante una rueda de prensa.

Breivik admitió responsabilidad en el atentado explosivo en la capital del país y de dispararle a jóvenes que asistían a un campamento del Partido Laborista en una isla. En total, 76 personas murieron en los dos ataques que han sacudido a la pacífica sociedad noruega.

La policía comenzó el martes la difusión de los primeros cuatro nombres de las víctimas fatales del estallido de la bomba en las oficinas del gobierno en Oslo y la matanza a tiros en la isla de Utoya.

Aunque sólo se facilitarán los nombres, edades y lugares de residencia, el anuncio probablemente traiga consigo una conmoción colectiva adicional a un país ya de por sí entristecido.

De la lista inicial de los nombres de los fallecidos, tres correspondían al atentado explosivo en Oslo y una a la matanza en la isla. Son Gunnar Linaker, de 23 años, de Bardu en el norte de Noruega, muerto en el campamento; y los residentes de Oslo Tove Aashill Knutsen, de 56; Hanna M. Orvik Endresen, de 61; y Kai Hauge, de 33.

El padre de Linaker dijo a The Associated Press que había estado en el teléfono con su hijo hablando de otra cosa cuando comenzó el tiroteo. "Me dijo: Papá, papá, alguien está disparando', y luego colgó".

En su audiencia del lunes, Breivic se declaró inocente de los cargos de terrorismo al afirmar que actuó para salvar a Europa de lo que considera una colonización musulmana.

"El espera que esto sea el comienzo de una guerra que durará 60 años. Pero su mente está muy... bueno, no quiero comentar más sobre su mente, pero eso es lo que cree", dijo Lippestad a reporteros. "Se considera un combatiente. Y él empezó esta guerra y tiene cierto orgullo por eso".

El sospechoso tomó drogas para estar "fuerte, eficaz y despierto", reveló Lippestad. Breivik asegura que forma parte de una organización integrada por varias células en países occidentales, incluidas dos en Noruega, agregó el abogado. Dijo que la familia de Breivik no ha pedido verlo.

A la pregunta de si Breivik le daba instrucciones para su defensa, Lippestead respondió que no y aseguró que no lo aceptaría. El abogado confirmó que él está afiliado al Partido Laborista pero desconoce si el sospechoso lo sabe. Lippestead también le dijo a The Associated Press que desconoce por qué Breivik lo escogió.

A decir del abogado, aunque Breivik está acusado de terrorismo también podría afrontar el cargo de crímenes contra la humanidad.

En Washington, el presidente Barack Obama y el vicepresidente Joe Biden expresaron personalmente sus condolencias por la tragedia durante una visita no anunciada a la residencia del embajador de ese país.

En el libro de condolencias, Obama escribió: "Todos tenemos el corazón destrozado por la pérdida trágica de tantas personas, en particular jóvenes en la plenitud de su vida. No hay palabras que puedan consolar la pena, pero por favor sepan que los pensamientos y oraciones de todos los estadounidenses están con el pueblo de Noruega, y que estaremos a su lado en todo momento".

El embajador se encuentra en Noruega. Después de que firmara el libro de condolencias, Obama saludó al personal de la embajada y les dijo: "Nos sentimos desolados... pero permaneceremos con ustedes".

Previamente, el ministro noruego de Justicia Knut Storberget indicó a los reporteros que empleados de su departamento siguen desaparecidos después de ambos atentados.

En un principio, las autoridades dijeron que 86 personas habían muerto en la isla de Utoya, pero redujeron el lunes la cifra a 68, porque al parecer se había contado dos veces 18 cadáveres en medio de la confusión tras la masacre.

"Hay personas del Ministerio de Justicia que están desaparecidas, tenemos personas que fueron muy afectadas por lo ocurrido y no tenemos oficinas", dijo Storberget a la prensa.

Storberget también defendió la actuación de la policía cuando respondió a una pregunta sobre los errores cometidos.

Las víctimas que llamaron a los servicios de emergencia durante la matanza recibieron la indicación de que colgaran porque las autoridades estaban ocupadas con el atentado explosivo en Oslo, según informaciones.

Fuente: AP y El País