“La resolución 2.087 está en consonancia con la política nacional de inclusión. El ser repetidor no tiene por qué ser excluyente para acceder a la Bandera. Hay chicos que han repetido por estar enfermos o porque tienen problemas socioafectivos, y creemos que no tenemos que excluirlo por eso. Al contrario, no podemos condenarlos porque un año no cumplieron con los objetivos y al siguiente si lo lograron. Hacerlo sería discriminarlos públicamente porque la lista de la Bandera de aspirantes a la Bandera se expone en la escuela”, defendió Ana María Becerra, titular de la Inspección General de Educación Primaria, quien junto con el grupo de inspectores elaboró los cambios en el reglamento que deberán cumplir abanderados y escoltas.
En la modificación que está vigente desde el 19 de este mes, se establece un procedimiento de elección de abanderados que está previsto que comience aplicarse desde este miércoles, es decir, 15 días antes del último día de clases.
A la hora de valor el desempeño escolar, resolución establece que “a los alumnos que no hayan repetido ningún grado, se les contemplará la calificación de cada espacio curricular resultado del promedio de los tres trimestres, mientras a los alumnos que hayan repetido algún grado se les considerarán las notas del año en que aprobó el año”.
En la misma situación estarán quienes hayan tenido que compensar algún grado, hasta 5º: a ellos se les computarán las notas que obtengan en diciembre o marzo, cuando hayan promovido ese espacio curricular.
“No se van a contemplar las malas notas del año que desaprobó, sino que se promediarán las notas de cuando aprobó el año. No sería justo que el alumno pague por repetir, porque el hecho de que haya repetido no es sólo responsabilidad suya, sino fundamentalmente responsabilidad de los mayores, de los padres, de los docentes, de la comunidad escolar. Nosotros creemos que si hacemos una verdadero acompañamiento en las trayectorias escolares, la repitencia se puede mejorar y esos chicos tienen que estar incluidos en la lista a la Bandera”, especificó Becerra.
Indisciplinados aspirantes En el artículo 19, la nueva resolución establece la valoración del ítem. “Respeto a las normas de convivencia”. Allí se sostiene que a la hora de la elección de abanderados y escoltas, se contemplarán las notas que obtengan en el último informe de sexto grado o de algún grado participante.
“Esto es preocupante, porque en las escuelas tenemos climas institucionales muy violentos, y esta modificación estaría abriendo la puerta a que un chico violento, que pudo cometer bulling con algún compañero o insultar a un docente en los dos primeros trimestres, tengan la chance de tener una buena nota en el último informe, y por tanto podrían ser aspirantes”, analizó la ex directora General de Escuelas, Emma Cunietti.
Para la ex funcionaria, esta habilitación no sólo es perjudicial porque se estaría premiando a quien pudo ser agresivo con sus compañeros o docentes, “sino que también daría un mensaje desmoralizante para aquellos alumnos que fueron víctimas de ese chico, porque le estaríamos diciendo que a ese niño que no respetó las normas de convivencia y que de hecho los agredió, no se le tuvo en cuenta su indisciplina, sino que sólo le bastó tener buena conducta en el último tramo”, concluyó Cunietti.
►En vigencia. Desde el 19 de noviembre está vigente la resolución que modifica el régimen de evaluación, promoción y acreditación en las escuelas públicas de gestión estatal y privadas dependientes de la DGE.►Se aplica. El procedimiento de elección de abanderado se prevé comenzar a aplicarse desde este miércoles, es decir, 15 días antes de que finalicen las clases.
►Desde la DGE justificaron la modificación aludiendo que este sistema de elección es más inclusivo que los anteriores
Las modificacionesLa nueva resolución que deja sin efecto la anterior evaluación y elección de abanderados prevé en el caso de los alumnos de primaria que repitan algún año, no computarle las notas del año que no cumplió con los objetivos y sí computar las calificaciones del momento en que logró promocionarse al año siguiente.