Radicales, demócratas y representantes de Unidad Popular frenaron, por 20 a 15, una iniciativa para tomar un crédito de $105 millones para afrontar sueldos de diciembre y otras erogaciones.

La oposición frustró un plan del Gobierno para endeudarse

Por UNO

El Gobierno se quedó sin la autorización de endeudamiento que solicitó a la Legislatura, porque laoposición se negó a dar vía libre al pedido que requería una solicitud de crédito por $105

millones.

Por 20 votos de la oposición (14 de la UCR, dos de Unidad Popular y cuatro del PD) contra 15

del oficialismo (14 del PJ y uno del Eje Peronista), la Cámara de Senadores mandó al archivo el

proyecto que hace 15 días había conseguido trabajosamente la media sanción en Diputados.

Después de casi dos meses en los que batalló para conseguir autorización para endeudarse, la

férrea postura de radicales y demócratas que se negaron a aprobar el pedido oficial terminó con las

aspiraciones del gobierno de Celso Jaque. Los justicialistas acusaron de "irresponsables" a los

radicales por poner a la provincia "al borde del caos". Para el radicalismo en tanto, simplemente

exageran.

Las acusaciones cruzadas se produjeron porque el proyecto de ley, además de pedir

autorización para endeudarse, contenía una serie de artículos en los que por un lado debían

aprobarse las partidas usadas para pagar el aumento salarial concedido a los estatales en marzo

($529 millones) y, por otro, contemplar una serie de reasignaciones presupuestarias necesarias para

llegar a fin de año y terminar el Presupuesto sin déficit.

"Sin la aprobación de esos cambios presupuestarios, el Gobierno no va a tener recursos para

pagar los salarios de diciembre ni el aguinaldo. Se ponen en riesgo los recursos necesarios para

que los comedores comunitarios lleguen a fin de año, no se podrán pagar los contratos del sistema

de salud", disparó, alarmado, el justicialista Miguel Serralta.

Desde el frente opuesto, el jefe de la bancada radical, Armando Camerucci, consideró que se

exagera. "Hace tres meses les advertimos que, si seguían con el ritmo de gasto que traían, no iban

a poder pagar los sueldos. Pero (Alejandro) Cazabán nos dijo que éramos los jinetes del

Apocalipsis, que presagiábamos calamidades. Ahora resulta que se dan cuenta de que no van a poder

pagar los sueldos; ahora no es culpa de nosotros", contestó, airado, el radical.

El justicialismo terminó en una encerrona política a la que lo llevó el radicalismo y que

derivó en el archivo de la ley.

Después de varias especulaciones, el Bloque Justicialista decidió pedir el tratamiento sobre

tablas del proyecto aun sabiendo que necesitaba dos tercios de los senadores presentes para que

resultara aprobado (25). El proyecto nunca había conseguido despacho de la Comisión de Hacienda y

Presupuesto para que pudiera se aprobado con más soltura, es decir, con mayoría simple.

El radicalismo aceptó el tratamiento sobre tablas, pero cuando se propuso votar el proyecto

en general se opuso, dejando al oficialismo sin más herramientas para negociar y con la única

opción de mandar el proyecto al archivo.

Ahora se plantea una tenaz discusión técnica y legal para establecer si el Ejecutivo podría o

no mandar otro proyecto de ley que contenga solamente las reasignaciones presupuestarias para que

pueda ser aprobado. Para el PJ es imposible, pero para la UCR es factible.