El juez federal Walter Bento consideró que Otilio Romano y Luis Miret fueron partícipes de los crímenes de la última dictadura militar por no indagarlos.

Imputaron a dos camaristas acusados de no investigar delitos de lesa humanidad

Por UNO

Dos de las máximas autoridades de la Justicia Federal de Mendoza  fueron acusadas junto aotros tres ex magistrados de esos tribunales, de ser responsables de actos de participación u

omisión en el plan sistemático de desaparición forzada de personas, torturas, secuestros y otros

delitos.

Todos perpetrados por el Estado antes y durante la última dictadura militar entre 1975 y

1983.

Cuatro de los cinco imputados serán indagados entre el 26 y el 31 agosto próximo para que dar

explicaciones y defenderse.

La Cámara Federal de Mendoza es el órgano mayor de la Justicia Federal de Mendoza, San Juan

y San Luís y sus integrantes rotan anualmente la

presidencia.

Es por eso que la resolución formalizada ayer al mediodía por el juez federal Walter Bento

provocó un verdadero tsunami en el edificio de calle

España y Pedro Molina.

Bento imputó, a pedido del fiscal Omar Palermo, a los jueces camaristas Otilio Romano y Luis

Miret y a tres ex magistrados que cumplieron funciones en esos fueros: el ex juez de la Cámara

Federal,  Guillermo Petra Recabarren, y sus ex pares Gabriel Guzzo y Rolando Carrizo.