Las condiciones en las que viven 41 internos del penal San Felipe son completamente inhumanas. Podredumbre por doquier, rejas oxidadas, moho, basura, duchas sin luz, solo agua fría los pocos días que el pabellón tiene agua. Se trata del módulo 4 A, donde están alojados 41 jóvenes entre 18 y 20 años que están aislados por problemas con el resto de la población carcelaria. Tienen un régimen de 23 horas de encierro por una hora de recreo, donde los llevan a las oscuras duchas que tiene el pabellón, las cuales cuentan con una precaria higiene. Los internos en sus celdas están amontonados y muchos de ellos no tienen ni dónde dormir. Además de suciedad con excrementos humanos que suman al hedor del módulo. Debido a estas condiciones deplorables, el Juez de Ejecución Penal, Sebastián Sarmiento, resolvió un Habeas Corpus para que en 45 días se ponga el lugar en condiciones. Otra de las medidas que impuso fue que hasta que no estén las mejoras en ese pabellón no pueden ser ingresados más internos, para no generar más complicaciones a la hora de hacer las reparaciones necesarias. "Son jóvenes adultos que están encerrados 23 horas y en su única hora de salida, de recreación, los meten en las duchas que son completamente oscuras y llenas de moho", sostuvo Sarmiento a este portal. Además indicó que son pocos los días que este módulo cuenta con agua, debido a que el suministro es constantemente interrumpido. Fue la madre de uno de los internos quien presentó un pedido de mejoras de las condiciones de alojamiento.
El juez de Ejecución Penal dio un plazo de 45 días para mejorar las condiciones de alojamiento de estos presos aislados.