Unos 40 penitenciarios comandados por el director del área, Sebastián Sarmiento, pasaron la madrugada en el edificio de detención de menores a pedido de la jueza de menores

El Servicio Penitenciario se hizo cargo del ex Cose después de la revuelta

Por UNO

A poco de terminarse la revuelta de internos de máxima seguridad del ex Cose, la jueza de menores María Amanda Fontemachi, solicitó el apoyo del Servicio Penitenciario por una noche para mantener el orden del Sistema Penal Juvenil.

El pedido de auxilio al sistema carcelario fue en un primer momento para convencer a los chicos a que bajen de los techos donde estuvieron toda la tarde. Luego fueron los operadores quienes se revolucionaron tras enterarse que cinco de ellos habían resultado heridos por los internos que originaron la revuelta para llegar hasta otro sector del edificio.

Fue la Policía que en un primer momento controló a los trabajadores del ex Cose que hicieron una protesta por las condiciones laborales a raíz de lo recientemente ocurrido.

El director del Servicio penitenciario, Sebastián Sarmiento, manifestó a diariouno.com.ar que durante la noche el Sistema Penal Juvenil estuvo custodiado por 42 penitenciarios y otros 14 policías de infantería quienes mantuvieron la calma.

Las autoridades estimaron que el apoyo de los penitenciarios será necesario hasta el mediodía de este miércoles hasta que se restablezca el servicio y todo vuelva a la normalidad.

Durante la tarde del martes al menos ocho internos del sector B de máxima seguridad atacaron a los operadores con palos y piedras, atravesaron el sector A y C para llegar hasta el E donde con un tronco intentaron derribar la puerta. Fuentes cercanas indicaron que iban en busca de un joven con quien habían tenido un problema hacía unos días.