La mandataria de Nueva York declaró el estado de emergencia en trece condados del norte del estado ante la llegada de una tormenta invernal
Las zonas más afectadas estarán al norte del estado de Nueva York.
Las tormentas invernales comenzaron su avance sobre el territorio de Nueva York durante la jornada del miércoles, cuando las primeras ráfagas de viento anticiparon la magnitud del fenómeno meteorológico que mantiene en vilo a las autoridades estatales.
Mediante un anuncio oficial realizado el miércoles, la gobernadora Kathy Hochul implementó medidas excepcionales para enfrentar las fuertes nevadas que amenazan la región de los Grandes Lagos, donde las condiciones climáticas podrían volverse extremadamente peligrosas.
La declaración del estado de emergencia abarca una extensa zona del norte de Nueva York, incluyendo los condados de Cattaraugus, Chautauqua, Erie, Franklin, Genesee, Hamilton, Herkimer, Jefferson, Lewis, Oswego, St. Lawrence, Wyoming y áreas contiguas.
Según las proyecciones meteorológicas difundidas por el Servicio Nacional del Clima, las regiones ubicadas al este de los lagos Ontario y Erie podrían recibir precipitaciones que alcancen los tres pies de nevadas, acompañadas por ráfagas de viento que oscilarían entre 30 y 45 millas por hora hasta el sábado.
Las previsiones meteorológicas motivaron la implementación de una alerta por nevadas lacustres que permanecerá vigente hasta las 7 de la tarde del viernes, generando preocupación entre las autoridades por la posible formación de condiciones de visibilidad nula.
Las autoridades viales establecieron prohibiciones para la circulación de camiones con acoplados y remolques vacíos en diversos tramos de las principales rutas estatales, incluyendo sectores de la Interestatal 90 desde la salida 53 hasta el límite con Pennsylvania.
"Estamos desplegando recursos y trabajando junto a nuestros socios gubernamentales mientras nos preparamos para todas las posibilidades", expresó Hochul durante el anuncio de las medidas preventivas, instando a los ciudadanos a mantenerse alertas y evitar los desplazamientos innecesarios.
Mientras algunas regiones afrontan las intensas nevadas, otras zonas como la ciudad de Nueva York experimentan un incremento en la velocidad del viento que genera preocupación por posibles cortes en el suministro eléctrico.
La Autoridad de Autopistas coordinó acciones con el Departamento de Transporte para implementar restricciones adicionales en las rutas US 219, NY 400 y diversos tramos de la Interestatal 86, buscando minimizar los riesgos para los conductores.
Las condiciones meteorológicas adversas motivaron el despliegue de equipos de emergencia en las zonas más vulnerables, donde las autoridades mantienen un monitoreo constante de la evolución del temporal.