En noviembre de 1969 Paul Gilmore tenía 13 años y viajaba con su familia de Londres a Melbourne cuando lanzó un mensaje en una botella al mar. Esta semana, casi 50 años después, un padre y su hijo la han encontrado en una costa al sur de Australia.
"Cuando Jyah me trajo la botella creí que me estaba gastando una broma", confesó el padre, Paul Elliot, al medio local Australia Broadcasting Corp. Pero, una vez que rompieron la botella y sacaron la carta había ciertos datos que le daban veracidad: el mensaje estaba escrito en una hoja con el logo de Sitmar Line, una compañía de cruceros que nació en los años 40, y la fecha coincidía con una ola migratoria de ingleses a Australia. La curiosidad removió a Paul y a Jyah y decidieron emprender una búsqueda para localizar al autor.
Aunque todavía no han hablado directamente con Gilmore, que es de origen británico, se contactaron con su hermana, Annie, quien les informó el hombre se encuentra de viaje en un crucero. "Es asombroso, totalmente increíble", dijo Annie a medios y añadió que, "cuando se entere, se volverá loco".
Su hermana, quien estaba con él cuando escribió el mensaje en una botella, recuerda que fue más de uno: "Hizo como seis. Recuerdo que mi padre se gastó una fortuna en las botellas". También reconoció su escritura y explicó que su familia emigró en busca de una vida mejor en Australia, aunque terminaron regresando a Inglaterra tan solo cuatro años después.
Por su parte, un oceanógrafo del gobierno australiano, David Griffin, explicó que la botella no podría haber permanecido a flote durante 50 años en la costa sur porque "el océano nunca se queda quieto". En una entrevista con el diario Times, Griffin desarrolló una teoría sobre lo que pudo haber sucedido: la botella quedó enterrada en una playa cercana por años y hace poco, durante una tormenta, resurgió de la arena.